La vicepresidenta de Argentina, Victoria Villarruel, respondió públicamente a las declaraciones del presidente Javier Milei, quien días atrás la había calificado de “traidora” a través de redes sociales tras la aprobación en el Senado de un conjunto de leyes que establecen beneficios sociales, entre ellos un aumento de emergencia para jubilaciones y pensiones por discapacidad.
La discusión se originó luego de que la cámara alta sancionara el pasado jueves un paquete legislativo impulsado por bloques opositores. Las medidas incluyen un incremento “excepcional y de emergencia” del 7.2 % para las jubilaciones mínimas, la prórroga de un régimen de pago de deuda previsional y la declaración de emergencia en materia de discapacidad hasta 2027. Estas normativas, aprobadas con el respaldo mayoritario del Senado, implican erogaciones fiscales que el Poder Ejecutivo considera incompatibles con sus metas de ajuste y superávit.
Desde su cuenta de Instagram, Villarruel afirmó que cumplió con sus funciones como presidenta del Senado, y explicó que su rol institucional le exige garantizar el normal funcionamiento parlamentario. “No traiciono, pero no convalido mentiras ni decisiones que perjudiquen a los argentinos”, expresó en una de sus respuestas a usuarios que la cuestionaban por haber permitido la sesión legislativa.
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La vicepresidenta también respondió a los señalamientos por el supuesto impacto fiscal de las leyes sancionadas. “Si hay equilibrio, asistir a los más desprotegidos no debiera ser tan terrible. El tema es que un jubilado no puede esperar y un discapacitado, menos. Que ahorre en viajes y en la SIDE (Secretaría de Inteligencia) y listo”, escribió en otro mensaje.
En cuanto al uso de recursos oficiales, Villarruel afirmó que no utiliza aviones del Estado para sus traslados, y que viaja en vuelos comerciales. “No uso aviones oficiales, esos los usa Milei y su hermana”, dijo, en referencia a Karina Milei, secretaria general de la Presidencia.
El presidente, por su parte, manifestó su rechazo a las leyes aprobadas y anticipó su intención de vetarlas. En una publicación posterior a la sesión, escribió: “Lo hicimos con el 15 % de la Cámara de Diputados, siete senadores, una traidora, pero con el mejor jefe de Gabinete de la historia”. Si bien no mencionó a Villarruel por su nombre, el mensaje fue interpretado como una referencia directa.
Contexto: la relación entre Milei y Villarruel se ha deteriorado desde el inicio del mandato en diciembre de 2023. A lo largo de los últimos meses se han registrado desacuerdos públicos y falta de coordinación entre ambos funcionarios. El último episodio visible ocurrió el 25 de mayo durante el Tedeum en la Catedral Metropolitana, cuando el presidente evitó saludar a su vicepresidenta.
Villarruel concluyó sus respuestas en redes sociales con una reflexión sobre su posición dentro del gobierno: “Yo razono con rectitud. Si fuera desleal, hace rato que estoy haciendo merengue con lo que veo”.
El episodio refleja una nueva instancia de tensión en la cúpula del Ejecutivo, en un contexto de debate legislativo sobre el gasto público y las prioridades del programa económico. El Poder Ejecutivo sostiene que la sostenibilidad fiscal es prioritaria, mientras que sectores de la oposición, con el acompañamiento de la vicepresidenta, han impulsado medidas de asistencia social en el Congreso. El desenlace institucional de este conflicto sigue abierto.
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