El ministro de Relaciones Exteriores de Guatemala, Carlos Ramiro Martínez, descartó cooperar como tercer país seguro para recibir migrantes deportados de Estados Unidos de otras nacionalidades, luego de que desde Estados Unidos se eliminara la posibilidad de asilo, con el regreso de Donald Trump. Con ello, desmiente el acuerdo del que hablaron Marco Rubio, secretario de Estado de EU, y el presidente del país centroamericano, Bernardo Arévalo.
En su gira de trabajo por México, Carlos Ramiro Martínez dijo que se tendrá una mesa de trabajo con autoridades de los Estados Unidos pero aclaro que el tema del tercer país seguro pierde su naturaleza.
"Vamos a tener una mesa de trabajo con autoridades estadounidenses alrededor del tema migratorio, para ir discutiendo eso, pero particularmente el tercer país seguro con una administración que no va conceder asilo pierde su naturaleza", dijo el canciller de Guatemala.
En el evento de repatriación de piezas arqueológicas de origen guatemalteco,
Martínez señaló que en la reciente reunión en Guatemala con el jefe del Departamento de Estado norteamericano, Marco Rubio, el tema de un tercer país seguro no se abordó.
“Lo que hablamos fue evidentemente continuar recibiendo guatemaltecos, recibir ciudadanos de los países centroamericanos, y el tema de las otras nacionalidades quedó pendiente de discutirse”, aseguró el funcionario guatemalteco en su gira de trabajo por México.
Las declaraciones de Carlos Ramiro Martínez se dan días después de que el presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo anunciara que su país recibiría migrantes deportados de Estados Unidos provenientes de otras naciones.
Según lo dicho por Arévalo, los migrantes originarios de otros países serían deportados a sus lugares de origen luego de su salida de los Estados Unidos a Guatemala.
¿Qué dijo el presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo?
El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, indicó el miércoles 5 de febrero que su país aceptará a migrantes de otras naciones que sean deportados desde Estados Unidos, según un acuerdo con el secretario de Estado de la Unión Americana, Marco Rubio.
“Hemos acordado aumentar en un 40% el número de vuelos de personas deportadas, tanto de retornados con nacionales como de deportados de otras nacionalidades”, dijo Arévalo en una conferencia de prensa con Rubio.