El príncipe Andrés, tercer hijo y segundo varón de la reina Isabel II renunció a todos sus títulos, incluído el de duque de York, de acuerdo con un comunicado emitido por el palacio de Buckingham este viernes 17 de octubre.
De acuerdo con el informe, la decisión fue tomada con el consentimiento de Carlos III para evitar que los escándalos sobre su persona perjudiquen a la Familia Real. Asimismo, Andrés aseguró que sobrepone su deber con su país y su familia, por lo cual decidió alejarse de la vida pública.
“En discusión con el Rey y mi familia inmediata y más amplia, hemos llegado a la conclusión de que las continuas acusaciones sobre mí distraen del trabajo de Su Majestad y la Familia Real. He decidido, como siempre lo he hecho, poner mi deber con mi familia y mi país en primer lugar. Me atengo a mi decisión hace cinco años de alejarme de la vida pública”, se lee en el comunicado.
Asimismo, subrayó que, de acuerdo con Su Majestad, ya no usará el título ni los honores que se le han conferido y negó las acusaciones en su contra. “Como he dicho anteriormente, niego enérgicamente las acusaciones en mi contra”, expresó.
Contexto: la decisión se da en medio de una serie de escándalos que han dañado la imagen de la monarquía, especialmente por los vínculos de Andrés con Jeffrey Epstein, el financista condenado por tráfico sexual de menores. Este nuevo episodio complica aún más el reinado de Carlos III, quien ya enfrenta retos para mantener la legitimidad y la popularidad de la Corona tras la muerte de Isabel II.
¿Qué dijo el príncipe Andrés?
"Tras conversaciones con el Rey y mi familia inmediata y más amplia, hemos concluido que las continuas acusaciones contra mí distraen del trabajo de Su Majestad y la Familia Real", dijo Andrés en una breve nota.
Cuando dice "acusaciones", el hasta ahora duque de York se refiere a una larga lista de escándalos en los que se ha visto involucrado en los últimos años por su relación con el magnate estadounidense y pedófilo convicto Jeffrey Epstein, así como con un presunto espía chino.
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En este sentido, Andrés dijo que negaba "rotundamente" todas las acusaciones contra él y afirmó que la decisión priorizaba su "deber" hacia la familia y su país, al igual que hizo hace cinco años, cuando se retiró de la vida pública.
"Con el consentimiento de Su Majestad, considero que debo dar un paso más. Por lo tanto, ya no usaré mi título ni los honores que me han sido conferidos", agregó.
Entre los títulos a los que renunciaría se encuentran el de duque de York, así como el de miembro de la Orden de la Jarretera, pero sí retendrá el título de príncipe, puesto que es algo que obtuvo de nacimiento al ser el tercer hijo de la fallecida reina Isabel II.
Su ex mujer, Sarah Ferguson, tampoco seguirá utilizando la nomenclatura de duquesa de York, pero sus hijas, Beatriz y Eugenia, sí mantendrían el título de princesas, de acuerdo con medios británicos.
BV