Tras el sermón de la obispa Mariann Edgar Budde en una ceremonia religiosa a donde asistió el presidente Donald Trump y donde la religiosa pidió clemencia para las comunidades marginadas, incluidos la LGBTQ, niños y migrantes quienes están sujetas a las nuevas políticas del mandatario.
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Este miércoles, el republicano exigió que la obispa que ofició la ceremonia religiosa por su investidura presidencial pida disculpas al "público" asistente por haberle pedido desde el púlpito misericordia.
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¿Quién es Mariann Edgar?
Mariann Edgar Budde de 65 años de edad es la primera mujer que dirige la Diócesis Episcopal de Washington y ha dirigido la diócesis desde 2011.
Antes de mudarse a Washington dirigió la iglesia de San Juan Minneapolis por 18 años. Budde es Licenciada en Teología por la Universidad de Rochester, también es autora de varios libros, entre ellos "Cómo aprendemos a ser valientes: momentos decisivos en la vida y en la fe"
La trayectoria profesional de Budde combina fe y activismo, una combinación que le permite dar una poderosa voz a las cuestiones sociales.
En 2020, la obispa escribió un artículo de opinión para The New York Times en el que se declaraba “indignada” y “horrorizada” por el uso que Trump hizo de la Biblia, que sostuvo en alto en la iglesia de St. John después de que agentes utilizaran gases lacrimógenos contra los manifestantes que pedían justicia racial en la cercana plaza de Lafayette.
¿Qué dijo la obispa Mariann Edgar Budde?
Trump asistió a la ceremonia junto a la primera dama, Melania Trump. Desde la primera fila, ambos escucharon en silencio y con gesto solemne los rezos, las melodías del órgano y los cantos, incluido un Ave María. A su lado estaban el vicepresidente, JD Vance y su esposa, Usha.
La obispo episcopaliana Edgar Budde pidió a Trump y Vance tener "misericordia" con "los gays, lesbianas y niños transgénero", así como por los que "recogen nuestras cosechas y limpian nuestras oficinas; los que lavan nuestros platos en un restaurante o los que hacen los turnos de noche en los hospitales".
"Pueden que no sean ciudadanos o puede que no tengan la documentación apropiada, pero la gran mayoría de los inmigrantes no son criminales", recordó Budde, entre la incómoda mirada de Vance, que en un momento buscó a Trump.
Ante su discurso, el presidente Trump pidió a la obispa se disculpe, al ser consultado por New York Times sobre el sermón y la petición del mandatario, Budde prefirió no comentar la reacción del republicano.
"No estaba necesariamente criticando al presidente”, pero que decidió hacer la petición “debido al miedo” que había visto en comunidades de migrantes y personas LGBT en Washington.