En medio de una Venezuela convulsa y a casi una semana de las elecciones presidenciales que se llevaron a cabo, el periodista Miguel Henrique Otero está cierto de que el régimen de Nicolás Maduro subestimó a la oposición, no esperaba la reacción que hoy mantiene a la nación y a la comunidad internacional con la demanda de que se transparenten resultados.
Otero (Caracas, Venezuela) es un periodista que vive en el exilio, presidente y director del periódico El Nacional, desde donde ha innovado en la utilización de la tecnología y a través del cual informa no solamente a la sociedad venezolana, también a la comunidad internacional, y para lo cual, la utilización de las redes sociales han jugado un papel preponderante.
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“Vimos una elección (28 de julio pasado) con mucha expectativa, en donde el régimen siempre pensó que la oposición no iba a tener un papel importante. Creyeron que esto iba a ser más o menos igual a lo anterior, porque la oposición no tiene recursos, está dividida, porque María Corina Machado tiene años en la palestra pública y creyeron que no tiene liderazgo. Nunca previeron (el régimen) lo que iba a suceder”, comenta a La Silla Rota este periodista venezolano.
Históricamente, añade Miguel Henrique Otero, Venezuela ha sido un país polarizado, se veía a una oposición luchando contra un sistema que parecía impenetrable. Sin embargo, la líder opositora, María Corina Machado, logró un liderazgo inesperado, se ganó el apoyo de sectores populares.
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“Cuando se dan cuenta (el oficialismo) que la diferencia en la votación no fue lo que esperaban, fue 2 a 1 y no los 5 puntos de diferencia que se manejaban, dijeron: ¿ahora qué hacemos?”, señala.
Y es que para este periodista exiliado, como a tantos venezolanos les ha tocado salir de su país para evitar la persecución, la diferencia tan grande en el resultado electoral, a favor de la oposición, el régimen de Nicolás Maduro, que encabeza “el chavismo”, se vio en apuros porque no pudo recurrir a sus prácticas de manipulación de votos, de actas. El apresurado anuncio de un supuesto triunfo de Maduro reveló la desesperación del sistema.
Sistema represivo, decenas de detenidos
Miguel Henrique Otero lamenta que ante la presión social en toda Venezuela, el gobierno comenzó una represión “terrible”. Para dicha confrontación, agrega, se ha ayudado de fuerzas extranjeras provenientes de Cuba, Nicaragua y hasta paramilitares rusos.
Tal confrontación ha llevado a que María Corina Machado y otros opositores estén en peligro y por ello decidieron que resguardarse en la clandestinidad.
“Tienen alrededor de 1,200 presos y están haciendo cosas terribles con ellos: los golpean, los están llevando a lugares clandestinos, se están llevando presos a los testigos de mesas de votación. María Corina teme por su seguridad, entonces, pasó a resguardarse en la clandestinidad”, menciona.
Ante lo que acontece en suelo venezolano, recuerda, la comunidad internacional ha condenado las acciones del régimen, exige el recuento de votos y muestra su apoyo a la oposición. Incluso, detalla, países aliados como México, Colombia, Brasil, Chile.
Sin embargo, naciones como China, Rusia, Irán, Cuba y Nicaragua, respaldan a Nicolás Maduro.
Escenario sombrío
El futuro de Venezuela es incierto y con posibles consecuencias para la región, advierte Otero. Se trata de una crisis política y económica, a la cual ahora se suma la represión y el éxodo de millones de venezolanos que terminan huyendo.
Y es que una de las cosas que se esperan, menciona, es el bloqueo internacional.
Además, añade, hay una situación complicada en el sector militar; el pueblo está en la calle y hay una especie de unidad internacional rechazando lo que ocurrió.
“Y todo ello puede, en un momento determinado, conducir a una situación de quiebre que, incluso, desestabiliza a la región, me atrevo a decir”, comenta.
Lo que es cierto para Miguel Henrique Otero es que la sociedad venezolana enfrenta una encrucijada, la falta de credibilidad en el régimen, la presión internacional y la movilización ciudadana son factores claves que podrían desencadenar una quietud en el país.
En todo este escenario venezolano, detalla, las redes sociales juegan un papel importantísimo, toda vez que son la herramienta a través de la cual la sociedad y el mundo entero se pueden informar sobre lo que ocurre. Para el caso de los medios de comunicación, indica, lo importante es verificar, como lo hace El Nacional, máxime cuando en el país cada vez más la libertad de expresión es más restringida.
Venezuela ahora requiere de un cambio urgente, apunta, la desaparición de la polarización y la unión de diversos sectores en contra de Nicolás Maduro son señales de que la sociedad venezolana anhela un mejor futuro.
La marcha a la que se ha convocado para este sábado, puntualiza Otero, promete ser un punto de inflexión en medio de la crisis que se vive. La reacción del régimen y las acciones que se tomarán en los siguientes días serán determinantes para el futuro del país.
Es una nación sumida en la incertidumbre y el miedo, la esperanza del cambio prevalece, y a pesar de los desafíos que enfrenta, los venezolanos siguen en la lucha de un país libre y democrático.
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VGB