A menos de un mes de las elecciones presidenciales de noviembre, el fiscal especial Jack Smith afirmó que Donald Trump incitó deliberadamente a sus partidarios para bloquear e intentar frenar la certificación de la victoria de Joe Biden en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2020.
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En respuesta a la solicitud de Trump para desestimar el caso, Smith sostuvo que es "incorrecto" afirmar que la acusación presentada en agosto no demuestra la responsabilidad del expresidente en los hechos del 6 de enero, los cuales culminaron en el asalto al Capitolio.
Smith señaló que las acusaciones enlazan las acciones de Trump ese día con sus intentos de obstruir de manera corrupta la certificación de los resultados electorales.
"Esas acusaciones vinculan las acciones del acusado el 6 de enero directamente con sus esfuerzos por obstruir corruptamente el procedimiento de certificación", escribió el equipo de Smith.
"Hizo deliberadamente que sus partidarios obstruyeran e intentaran obstruir", agregó.
Además, subrayó que la acusación sustitutiva deja claro que Trump deliberadamente incitó a sus partidarios a interferir con el proceso. Para ello, los convocó a Washington, D.C., y luego les ordenó marchar al Capitolio con el propósito de presionar tanto al vicepresidente como a los legisladores para que rechazaran los certificados legítimos y, en su lugar, validaran documentos electorales fraudulentos.
"Contrariamente a la afirmación del acusado... de que no tiene ninguna responsabilidad fáctica o legal por los 'acontecimientos del 6 de enero', la acusación formal sustitutiva alega claramente que el acusado deliberadamente provocó que sus partidarios obstruyeran e intentaran obstruir el procedimiento al convocarlos a Washington, DC, y luego ordenarles que marcharan al Capitolio para presionar al vicepresidente y a los legisladores para que rechazaran los certificados legítimos y, en cambio, confiaran en los certificados electorales fraudulentos".
¿Qué ha pasado con el juicio contra Trump?
El pasado 30 de agosto, los fiscales generales y el equipo legal del magnate neoyorquino dieron a conocer un documento conjunto, en el que presentan propuestas opuestas sobre cómo avanzar en el caso contra Trump, por conspirar para revocar las elecciones de 2020.
Por un lado, los fiscales sugieren revisar el caso con la intención de sortear el fallo de inmunidad presidencial del Tribunal Supremo de Estados Unidos. Por el otro, los abogados de Trump proponen discutir determinadas disputas legales previas al juicio, las cuales podrían dejar sin efecto algunos de los cargos presentados en contra de su cliente.
Los abogados de Trump proponen un calendario específico para tratar dichas disputas, el cual alarga el proceso judicial en contra del ex mandatario al menos hasta principios de 2025, cuando, en caso de ganar las elecciones, podría estar ya fungiendo como nuevo presidente de Estados Unidos.
La defensa de Trump argumenta que la acusación formal emitida por los fiscales todavía contiene acusaciones por las que Trump, como expresidente, tendría derecho a la inmunidad, y que podrían buscar la desestimación del caso.
Mientras tanto, el 27 de agosto, el fiscal especial a cargo de la investigación contra Trump por el asalto al Capitolio, presentó una nueva acta de acusación contra el ex mandatario, rebajando las alegaciones del expresidente estadounidense para ajustarse al dictamen del Tribunal Supremo de Estados Unidos sobre la inmunidad de sus actos como mandatario.
Smith mantuvo los cuatro cargos anteriores, como el de conspiración para obstruir un procedimiento oficial, pero acotó algunas alegaciones sobre sus planes de subversión electoral.
The Washington Post informó que el fiscal retiró las acusaciones contra Trump, vinculadas con sus esfuerzos para que el Departamento de Justicia apoyara su reivindicación de que había habido un fraude electoral en los comicios de 2020, en los que ganó el demócrata Joe Biden. Esto, luego de que en julio de este año, el Tribunal Supremo de Estados Unidos determinó que el exmandatario no podía afrontar cargos relacionados a su interacción con miembros del Departamento de Justicia al considerar que su interacción con ese gabinete formaba parte de las potestades de su puesto.
El caso del asalto al Capitolio, que ocurrió el 6 de enero de 2021, involucró a unas 10,000 personas, la mayoría simpatizantes de Trump, quienes marcharon contra el Congreso en reclamo de un supuesto fraude electoral. En dicho evento, unas 800 personas irrumpieron en el edificio legislativo mientras se estaba certificando la victoria de Biden.
Hubo cinco muertos y cerca de 140 agentes heridos.