COREA DEL NORTE

“Quiero que el mundo sepa que me arrepiento de haber nacido en este país”

Un constructor desesperado, con familia y con hambre, gana en promedio 53.50 pesos al día; imposible para comprar una bolsa de arroz

Pobreza y hambruna en Corea del Norte
Pobreza y hambruna en Corea del NorteCréditos: Especial
Escrito en MUNDO el

La BBC Mundo entrevistó a ciudadanos que ya no saben cómo ganarse la vida, y en uno de sus puntos más álgidos de su desesperación cuentan de manera ultra privada lo que es vivir sin dinero, con trabajos con sueldos que no alcanzan para nada y que además, no hay nada qué comprar.

Un constructor está frustrado:

"Quiero que la gente sepa que me estoy arrepintiendo de haber nacido en este país", se desahoga.

Así es vivir en Corea del Norte actualmente. Ganar 4,000 wones al día no alcanzan ni para una bolsa de arroz; pero además en los mercados no hay alimentos qué comprar. Todo esto es culpa de un momento de la historia de Corea del Norte, liderada por Kim Jong-un, donde debido a la pandemia de covid-19 restringió más el flujo de mercancías del exterior, entre ellas medicamentos y alimentos.

Los 4,000 pesos al día son, equivalentes a 53.50 pesos mexicanos.

En Corea del Norte, entre la población, crecen los rumores de gente que se muere de hambre, lo que recuerda a la terrible hambruna de los años 90.

Hace 30 años, el régimen de Corea del Norte dio concesiones a sus ciudadanos y rompió el rígido orden social.

“El estado, incapaz de alimentar a su gente, les dio pedazos de libertad para que hicieran lo necesario para sobrevivir. Miles salieron del país y encontraron refugio en Corea del Sur, Europa o Estados Unidos”, relata la BBC Mundo.

"Si vivo de acuerdo a las reglas, seguramente me moriré de hambre, pero por tratar de sobrevivir podrían arrestarme, considerarme un traidor y ejecutarme", relata Chan Ho.

"Estamos atrapados aquí, esperando morir".

Gobierno de Corea del Norte: otras prioridades

Pero su líder, Kim Jong-un piensa diferente. El bienestar de su población no es primordial. Corea del Norte afirmó a inicios de junio, un día después del lanzamiento fallido de un satélite de reconocimiento, que el aparato será "correctamente" puesto en órbita pronto y arremetió contra Estados Unidos y los países que han protestado por este plan.

"El satélite de reconocimiento de la RPDC se pondrá correctamente en órbita espacial en un futuro próximo y comenzará su misión", dijo Kim Yo-jong, la influyente hermana del líder norcoreano, en un comunicado publicado por la agencia estatal de noticias KCNA.

Kim criticó a los países que han protestado por los planes de Pionyang de poner en órbita un satélite de estas características, especialmente a Estados Unidos, al que acusó de actuar como "un grupo de gánsteres" que acusaría al régimen de "ilegal y amenazante" incluso si intentara lanzar el satélite "a través de un globo".

En abril, las maniobras militares de Corea del Norte incluyeron un dron marino que según el gobierno norcoreano tiene un sistema para la generación de tsunamis radiactivos ya  verificado, comprobando su "mortífera" capacidad de ataque.

En el año, Kim Jong-un ha hecho test de armas y cabezas atómicas, en un mensaje que recalca que su gobierno está volcado en potenciar su arsenal nuclear táctico para su posible uso en la región de la península coreana, donde la tensión continúa escalando. Esto nuevamente tensa las relaciones internacionales sobre todo con Japón y Corea del Sur, quienes con Estados Unidos han realizado ejercicios militares, por lo que la zona nuevamente vuelve a calentarse.

Dura realidad: el miedo a morir de hambre

Corea del Norte depende de importaciones porque no produce los suficientes alimentos para darle de comer a su población. Al sellar la frontera por la pandemia, el gobierno cortó las cadenas de suministro de comida, medicinas y demás productos para subsisrtir..

Al principio, Chan Ho tenía miedo de morir por covid, pero ahora le preocupa morir de hambre, especialmente después de ver que personas a su alrededor empezaron a morirse.

La primera familia en su aldea en morir de inanición la formaban una madre y sus hijos. La mujer estaba demasiado enferma para trabajar. Sus hijos trataron de mantenerla viva lo más que pudieron pidiendo dinero en las calles, pero al final murieron los tres.

"No puedo dormir cuando pienso en mis hijos, en que tengan que vivir para siempre en este infierno sin esperanzas", dice.