Durante las últimas semanas, el tema del fentanilo y su relación con México ha sido recurrente en las audiencias del Capitolio en Washington. La familia Zheng, una organización criminal que comenzó a operar en 2013, ha sido señalada como responsable del tráfico de fentanilo y precursores químicos desde China a México, y ha estado asociada con los cárteles del Pacífico y Jalisco Nueva Generación. En 2019, la Unidad de Inteligencia Financiera de México ya había alertado sobre la actividad de esta organización criminal así lo menciona Raymundo Riva Palacio en su columna.
El problema se ha agravado debido a que los productores chinos han cambiado su método de envío por correo a través de México, después de que el Servicio Postal de los Estados Unidos endureció sus controles y supervisión. La conexión criminal entre México y China se ha fortalecido, y los cárteles mexicanos se han encargado de la producción final en superlaboratorios equipados con maquinaria y equipo importado de China.
De acuerdo con lo comentado con el periodista, la relación entre China y México ha llamado la atención desde 2018, cuando un ciudadano chino, Gan Xianbing, fue detenido en el aeropuerto de Los Ángeles y acusado de lavar dinero para el Cártel del Pacífico en Chicago. Gan fue sentenciado a 14 años de prisión. Se ha descubierto que hay muchos intermediarios chinos que tienen negocios legítimos que utilizan para lavar dinero.
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La principal conexión criminal entre China y México es con el Cártel de Los Zheng, que opera a través de múltiples compañías fantasma que parecen ofrecer servicios legítimos. Esta organización tiene su base en Shanghái y es encabezada por Fujing Zheng y su padre, Guanghua Zheng. Los Zheng promueven el fentanilo y otras drogas sintéticas en sitios de internet multilingües, y operan no sólo en México sino en al menos 25 países; esa es la información que se presenta en la columna.
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Los estadounidenses están preocupados porque el fentanilo está matando a miles de personas en su país, y consideran que el gobierno mexicano no está haciendo lo suficiente para controlar el problema.
La lucha creciente entre Estados Unidos y China por la supremacía mundial también está relacionada con este tema, ya que los estadounidenses están convencidos de que el tráfico ilegal de fentanilo y sus precursores está siendo impulsado por el gobierno chino. La forma en que la relación criminal entre grupos chinos y mexicanos está apareciendo recurrentemente en el tráfico ilegal del fentanilo refleja la creciente tensión entre ambos países.
El fentanilo
El fentanilo es, en palabras sencillas, un analgésico sintético. Se utiliza comúnmente para tratar el dolor en pacientes con cáncer o en situaciones de dolor crónico intenso. Sin embargo, también se ha convertido en una droga altamente adictiva y peligrosa cuando se utiliza de manera recreativa .El fentanilo ha sido responsable de una creciente epidemia de sobredosis en todo el mundo, especialmente en los Estados Unidos, donde ha sido responsable de la muerte de más de 100,000 personas en la última década. La droga es hasta 100 veces más potente que la morfina y puede ser fatal en dosis muy pequeñas.
Gran parte del fentanilo que se encuentra en los Estados Unidos proviene de China, donde se produce de manera ilegal en laboratorios clandestinos. Las autoridades chinas han tomado medidas para cerrar estos laboratorios y controlar la producción de la droga, pero aún hay una gran cantidad de fentanilo que se produce y se envía a través de canales ilegales.
Además, el fentanilo se ha convertido en una mercancía muy valiosa para los carteles de la droga mexicanos, que lo han utilizado para aumentar sus ganancias y poder en el mercado negro de drogas. Muchos de los carteles obtienen el fentanilo de China y luego lo procesan en México antes de venderlo a distribuidores en los Estados Unidos.
La crisis de opioides que se ha desatado en los Estados Unidos en los últimos años ha llevado a una mayor atención sobre el fentanilo y su papel en la epidemia de sobredosis. A medida que las autoridades han intensificado sus esfuerzos para frenar el flujo de la droga, los traficantes han comenzado a utilizar nuevas estrategias para evadir la detección y mantener su control sobre el mercado negro.
Aunque hay algunos signos de que la epidemia de opioides puede estar disminuyendo, la amenaza del fentanilo sigue siendo muy real. Las autoridades de todo el mundo están trabajando para abordar este problema, pero es un desafío enorme debido a la naturaleza clandestina del mercado negro de drogas y la facilidad con la que se puede producir y distribuir el fentanilo.
La guerra de palabras entre Estados Unidos y México
La relación entre Estados Unidos y México sigue tensa debido al problema del fentanilo y otros opioides. Estados Unidos culpa a México por la negligencia y la presencia de cárteles de la droga, mientras que México argumenta que el consumo de estas drogas es principalmente responsabilidad de los estadounidenses. La corrupción es un factor clave en ambos lados de la frontera.
Ante esta situación, algunos políticos estadounidenses han propuesto que el Ejército de los Estados Unidos intervenga en México para combatir a los cárteles, lo cual violaría tratados internacionales y la soberanía del país. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se ha opuesto a esta idea, diciendo que México es un país libre y soberano y que no permitirá la intervención extranjera.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha anunciado recientemente que se aumentará la cantidad de máquinas de detección de drogas y se revisarán más minuciosamente los paquetes y cargas que pasan por la frontera para evitar el cruce de fentanilo y otros opioides. El actual fiscal general de los Estados Unidos, Merrick Garland, ha destacado la necesidad de la colaboración del gobierno mexicano para combatir a estas organizaciones y clasificó a las personas de los cárteles como las personas más horribles del mundo.
El presidente López Obrador ha dicho que su gobierno se enfoca en atender las causas que llevan a la violencia y el crimen, así como en la creación de empleos y el bienestar social, y que la solución a los problemas debe ser mediante la cooperación y el diálogo.
Los dimes y diretes entre ambos países no cesan; aunado a estos problemas relacionados al fentanilo, están los existentes con los cárteles de la droga y las voces del gobierno de los Estados Unidos, algunas desde el congreso y otras desde el gabinete, mencionan que es necesario que el ejército de norteamericano entre al país con la finalidad de hacer que luchen contra los cárteles ya que las fuerzas de México así como el accionar del gobierno es suficiente.