La oficina doctrinal del Vaticano publicó las condiciones bajo las cuales los trans pueden ser padrinos en ceremonias católicas como bautizos y matrimonios, aperturando a un más la inclusión de este grupo poblacional. La aprobación de que los trans participen en ceremonias religiosas se da en respuesta a las preguntas realizadas por un obispo a los líderes de la iglesia.
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Fue el obispo de Santo Amaro, Brasil, José Negri, quien el pasado mes de julio remitió a la oficina doctrinal del Vaticano una serie de seis preguntas en las que cuestionaba a los líderes de la iglesia sobre la participación de personas de la comunidad LGBTT+ en ceremonias litúrgicas como el bautismo y el matrimonio.
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Estas preguntas fueron respondidas por la oficina doctrinal del Vaticano en un documento de tres páginas firmadas por el jefe del departamento, el cardenal argentino Víctor Manuel Fernández, y aprobadas por el papa Francisco el 31 de octubre. Posteriormente, fueron publicadas en el sitio web oficial de la Iglesia en italiano este miércoles 8 de noviembre.
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En el documento, la Iglesia Católica confirma que los trans pueden ser padrinos en bautizos, testigos en liturgias religiosas, como el matrimonio; y recibir el bautismo, aunque bajo ciertas consideraciones, pues aunque el papa Francisco se ha mostrado más resiliente a la integración de la comunidad LGBTT+ en las prácticas religiosas no ha buscado cambiar las enseñanzas eclesiásticas.
Tal es el caso de la tradición católica que señala que la atracción hacia personas del mismo sexo no es pecaminosa, pero los actos sexuales entre ellos sí lo son.
Con relación a si los trans pueden ser bautizados, la oficina doctrinal del Vaticano aseguró que sí, pero con algunas restricciones y siempre que no haya "riesgo de causar un escándalo público o desorientación entre los fieles".
Al final, la decisión de permitir que un trans participe en ceremonias religiosas recaerá en el sacerdote local, quien deberá actuar con "prudencia pastoral" en su decisión para garantizar la comunión de los fieles.
De acuerdo con la actual legislación canónica de la Iglesia, no existe ningún impedimento para que una persona con una relación homosexual sea testigo en una boda católica, sin embargo, el departamento, conocido como el Dicasterio de la Doctrina de la Fe, no ha dejado claro de si una pareja del mismo sexo podría bautizar a un bebé adoptado o tenido mediante vientre de alquiler.
VGB