LONDRES.- Cientos de personas decidieron acampar para dar este lunes 19 de septiembre el último adiós a la reina Isabel II, en un funeral de estado que se prevé como uno de los eventos que más personas reúnan en las últimas décadas.
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En la capital británica hay varias calles a las que el público general no puede acceder, así como un notable operativo de seguridad, con lo que se dan los últimos detalles para la ceremonia que se realizará este lunes en la Abadía de Westminster.
Personas de diversos lugares del país aguardaron su turno para presentar sus respetos en el féretro de la reina, todo envuelto en "un ambiente de respeto y amigable, fantástico", según lo que dijeron a EFE una de las personas que asistieron.
Para este lunes, unos 2 mil 300 agentes de policía custodiarán el féretro de la reina Isabel II en su último viaje, desde la Abadía de Westminster, donde se oficiará su funeral de Estado, hasta el castillo de Windsor, donde será enterrada en la capilla de San Jorge.
Según informó este domingo la Policía Metropolitana de Londres, más de 3 mil agentes de fuerzas policiales de varios lugares del Reino Unido formarán parte del equipo compuesto por 10 mil agentes encargado de velar por la seguridad del servicio de mañana, al que asistirán más de 2 mil invitados, entre ellos unos 500 dignatarios y miembros de las monarquías de todo el mundo.
LOS MANDATARIOS TAMBIÉN LA DESPIDEN
La muerte de la reina Isabel II ha reunido en Londres a cientos de jefes de Estado y dignatarios de todo el mundo, que este domingo asistieron a una recepción ofrecida por el nuevo monarca británico, Carlos III, antes del funeral de Estado que se oficiará el lunes en la Abadía de Westminster.
Los reyes de España, Felipe VI y Letizia, estuvieron entre los cerca de 500 invitados al palacio de Buckingham, junto con mandatarios como el presidente de Estados Unidos, Joe Biden; los emperadores de Japón, Naruhito y Masako; la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y soberanos de las casas reales europeas.
El Ministerio de Exteriores del Reino Unido, que coordina la organización del funeral de Isabel II, ha dispuesto autobuses para trasladar a la mayoría de dignatarios a los principales actos previstos durante estos días a fin de facilitar la movilidad por el centro de la capital británica.
Biden, así como el presidente de Francia, Emmanuel Macron, el rey Abdulá II de Jordania y otros líderes tienen, pese a todo, el visto bueno del gobierno para circular en sus propios vehículos.
Sólo quedaron fuera de la lista para despedir a la Reina Isabel II seis países: Siria y Venezuela, con los que Londres no mantiene vínculos diplomáticos; Rusia y Bielorrusia, por su implicación en la invasión de Ucrania, así como Afganistán y Birmania, ante la compleja situación política que atraviesan.
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