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Trump ama las hamburguesas y el pollo KFC, ¿pero arrojó su lunch contra la pared?

“Había salsa catsup goteando por la pared de la Casa Blanca”, donde la comida rápida de Trump acabado por un todavía presidente de EU enfurecido

Créditos: Especial
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Escrito en MUNDO el

El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, se sabe tiene una curiosa dieta basada en productos de Kentucky Fried Chicken, McDonald’s, pizza y Coca Cola.

En el libro escrito por dos exasesores del presidente Corey Lewandowski y David Bossie: “Let Trump be Trump”, se explica que el magnate y presidente estadounidense gusta de la comida rápida.

Suzy Evans, historiadora, destaca que la dieta del presidente “es un claro reflejo del estado social cultural y político de un país”.

EL MENÚ QUE PIDE TRUMP EN UN MCDONALD’S

El libro explica que lo que le gusta pedir a Trump en la famosa cadena de comida rápida consiste en dos Big Macs, dos bocadillos de pescado frito y una malteada de chocolate.

Mientras tanto, cuando Trump viaja en el avión presidencial gusta de consumir productos de KFC, Mc Donald's y Coca Cola Light.

Por ello, de acuerdo a especialistas, el presidente consume en una sola comida 2 mil 420 calorías (cantidad recomendada para un hombre en todo el día) en una ingesta de alimentos con sal y grasa, principalmente.

SOBREPESO DE TRUMP

Por lo demás, Trump tiene sobrepeso y roza la categoría de obeso, con un índice de masa corporal de 29.9, dado que pesa 108.4 kilos y mide 1.92 metros. 

ARROJA SU LUCH CONTRA LA PARED

La declaración del exfiscal general Bill Barr en una entrevista con The Associated Press de que las elecciones de 2020 estuvieron libres de fraude enfureció tanto al entonces presidente Donald Trump que arrojó su almuerzo contra la pared, testificó una asistente el martes. 

Cassidy Hutchinson, exasistente de la Casa Blanca, reveló la furiosa reacción del presidente en una audiencia explosiva en la que describió cómo la Casa Blanca sabía en los niveles más altos que la violencia no solo era posible, sino probable el 6 de enero, días antes de su intento de anular la elección.

“Había ketchup goteando por la pared” donde la comida de Trump había impactado el lado del comedor, testificó Hutchinson.

Un camarista de la Casa Blanca “comentó que el presidente estaba bastante enojado por la entrevista con AP del fiscal general y que había tirado su almuerzo contra la pared” en respuesta, agregó.

La afirmación pública del fiscal general de que los resultados de las elecciones de 2020 no podrían haber sido cambiados por el fraude fue un gran golpe para los esfuerzos de Trump por convencer al público en general de que se había producido tal fraude, y que su victoria ya había sido “robada” por el ahora presidente Joe Biden.

Trump y su equipo estuvieron involucrados de forma activa en presionar al Departamento de Justicia para que hiciera una declaración en sentido contrario durante semanas, lo que llevó a los comentarios públicos algo raros del fiscal general.