El presidente de Estados Unidos urgió al Congreso de su país a “hacer realmente algo, por Dios santo, hagan algo”, luego de los últimos tiroteos en territorio estadounidense.
“Esta vez tenemos que ir de verdad, realmente hacer algo, el sentido común por todas las personas en sus casas”.
El mandatario estadounidense indicó que esto no es para quitar las armas, sino para responsabilizarnos; “respeto las culturas y tradiciones, es parte de la segunda enmienda que no es absoluta”.
Criticó que la industria de las armas esté fuertemente protegida en el país.
Tonight, I’m addressing the nation on the recent tragic mass shootings, and the need for Congress to pass commonsense laws to combat the epidemic of gun violence. https://t.co/qkMEGKhsqH
— President Biden (@POTUS) June 2, 2022
"Necesitamos prohibir las armas de asalto y los cargadores de alta capacidad. Y, si no podemos prohibir las armas de asalto, deberíamos aumentar la edad para comprarlas de 18 a 21 años", dijo Biden en una intervención pronunciada en horario de máxima audiencia.
En un discurso de cerca de 20 minutos en el que repitió una y otra vez "es suficiente", Biden lanzó una serie de peticiones a los legisladores para que tomen medidas concretas para el control de las armas en el país, después de los recientes tiroteos de Uvalde, Búfalo (Nueva York) y Tulsa (Oklahoma).
En concreto, solicitó que también se refuerce la verificación de antecedentes de los potenciales compradores, que se aplique la ley para garantizar el almacenamiento seguro de las armas y que se "derogue la inmunidad que protege a los fabricantes de armas".
"¿Cuántas carnicerías más estamos dispuestos a aceptar? ¿Cuántas más vidas de estadounidenses inocentes deben ser arrebatadas antes de que digamos basta?", subrayó en un discurso que, por momentos, se tornó emotivo.
Según Biden, los supervivientes de las masacres tienen un mensaje para los políticos: "Hagan algo, solo hagan algo, por el amor de Dios, hagan algo, porque después de Columbine, después de Sandy Hook, después de Charleston, después de Orlando, después de Las Vegas (...) no se ha hecho nada", dijo Biden en referencia a las principales matanzas que en los últimos años han golpeado el país.
Situado en el extremo de una alfombra roja y un pasillo formado por 56 velas encendidas para representar las víctimas de tiroteos de los estados y territorios de Estados Unidos, Biden insistió en que la segunda enmienda de la constitución estadounidense, sobre el derecho a la posesión de armas, "como todos los demás derechos, no es absoluta".
"No se trata de arrebatarle los derechos a nadie. Se trata de proteger a los niños, de proteger a las familias. Se trata de proteger a comunidades enteras. Se trata de proteger nuestra libertad para ir a la escuela, a una tienda de comestibles, a una iglesia" sin ser asesinado a tiros, dijo Biden.
Su intervención coincide con las conversaciones en las que desde la semana pasada participa un grupo de nueve senadores republicanos y demócratas para tratar de acordar medidas de control de armas de fuego que puedan recibir el apoyo de legisladores de ambos partidos.
Las medidas serían mucho más modestas que la prohibición de armas de asalto que defienden la mayoría de demócratas, incluido Biden, y se centrarían en reforzar la seguridad en las escuelas y financiar programas de salud mental, ambos requisitos de los republicanos.
También buscarían expandir la comprobación de antecedentes para poder comprar armas de fuego y dar incentivos a los estados para que aprueben leyes que permitan a las autoridades confiscar las armas de individuos considerados peligrosos.
Precisamente, este jueves el Comité Judicial de la Cámara de Representantes —la Cámara Baja del Congreso— se encuentra debatiendo una serie de medidas de control de armamento, recogidas bajo el título de Acta para la Protección de Nuestros Hijos.
Las medidas buscan introducir una limitación de diez balas por cargador, aumentar la edad mínima para comprar un fusil semiautomático de los 18 a los 21 años, y dar incentivos a los estados para aprobar leyes de confiscación de armas.
También buscan limitar el uso de "armas fantasma", que pueden comprarse por partes en internet y después montarse en casa, con lo que son imposibles de rastrear ya que no tienen número de serie.
El debate sobre la medida ha visto a la mayoría de representantes republicanos condenar cualquier intento por limitar la capacidad de los estadounidenses de comprar armas de fuego, muchas veces repitiendo el típico mensaje conservador de que "lo único que detiene a un tipo malo con un arma es un tipo bueno con un arma".
Está previsto que la totalidad de la Cámara de Representantes, donde los demócratas tienen la mayoría, debata este paquete de medidas la semana que viene.
CINCO HERIDOS EN NUEVO TIROTEO
La tarde de este jueves, cinco personas resultaron heridas de bala, durante un funeral en el suroeste de Wisconsin, Estados Unidos.
Al momento, “suman cinco los heridos, aunque se desconoce el alcance de las lesiones e identidades de los mismos”, indicó el Departamento de la Policía de Racine.
Este nuevo incidente se da a sólo un día del tiroteo ocurrido en un hospital de Tulsa, Oclahoma, donde cuatro personas murieron y otras resultaron heridas.
También, tiene lugar cuando Estados Unidos aún no se repone de la masacre ocurrida el pasado 24 de mayo , cuando 19 niños y dos profesoras fueron asesinados por disparos de un joven de 18 años en una escuela de Uvalde (Texas), donde el agresor fue abatido después por la Policía.
El tiroteo, de este jueves, se produjo cuando familiares despedían a Da’Shontay Lucas King Sr, hombre de 37 de años quien murió el pasado 20 de mayo cuando huía de la policía y ésta le disparó (este incidente se encentra bajo investigación estatal).
El Departamento de Policía de Racine indicó a los residentes que se mantuvieran lejos del Cementerio Graceland, debido a “múltiples tiros disparados” en el lugar, a las 14:26 (hora local).
“La escena está aún activa y es investigada”, acotó una policía estatal, en un mensaje citado por el diario local The Journal Times.
CONVERSACIONES ALENTADORAS
Previamente, la vocera de la Casa Blanca indicó que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, considera "alentadoras" las conversaciones entre senadores del partido Demócrata y Republicano sobre el control de armas de fuego que están teniendo lugar a raíz de los tiroteos de las últimas semanas en Búfalo (Nueva York), Uvalde (Texas) y Tulsa (Oklahoma).
"Es la primera vez en mucho tiempo que vemos este tipo de conversaciones entre miembros de ambos partidos", dijo este jueves la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, durante su rueda de prensa diaria.
Jean-Pierre respondía a preguntas de los periodistas sobre el discurso que está previsto que Biden dé esta tarde sobre lo que considera "una epidemia de violencia con armas" en Estados Unidos.
Durante días, la Casa Blanca ha insistido en que Biden quería dejar espacio a los legisladores para alcanzar acuerdos en el Senado, ya que la actual composición de la cámara, dividida por la mitad entre demócratas y republicanos, obliga a sumar a representantes conservadores para aprobar la mayoría de propuestas de los progresistas.
La portavoz aseguró hoy, sin embargo, que no ve contradictorio que el presidente explique "al pueblo estadounidense" sus prioridades a la vez que apoya las conversaciones que están teniendo lugar en el Congreso.