Un sacerdote en estado de ebriedad provocó una carambola en las calles de Valencia, España, dañando al menos cinco vehículos que estaban estacionados; culpó al vino de consagrar.
De acuerdo con la Policía Nacional, el sacerdote perdió el control de su unidad y dañó al menos cinco vehículos que estaban estacionados, por lo que fue detenido.
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Tras ser detenido, al sacerdote se le realizó la prueba de alcoholemia y resultó que, rebasaba por mucho el límite permitido en Valencia, España, donde es de 0.40 miligramos. El sacerdote tenía 0.54 mg/ por litro de alcohol.
Ante lo sucedido, el cura que se excedió en la dosis del vino de consagrar, se disculpó con los afectados y se comprometió a pagar los daños.
Según medios catalanes, el sacerdote justificó su borrachera porque bebió del vino que forma parte del protocolo en misa, sin embargo, el cura le aclaró a los afectados que no iría a ningún lado y se haría responsable los daños.
Además, al comprobar que el sacerdote conducía en estado de ebriedad se le impuso una infracción administrativa por el delito contra la seguridad vial.