Kyle y Adam se casaron en 2016 y se mudaron a las afueras de la ciudad de Detroit, en Michigan. Ambos querían tener hijos, por lo que comenzaron a buscar en agencias de adopción, según explicó el medio The New Yorker.
Un amigo de Kyle mencionó a Tara Lee, con quien había tomado clases anteriormente. La mujer de 35 años dirigía su propia agencia de adopción: Always Hope.
La pareja, emocionada por la posibilidad de finalmente tener hijos, firmó los papeles el mismo día que conoció a Lee. También le entregó un depósito de 200 dólares.
En abril de 2017, Lee les envió un correo para contarles sobre Angel, una madre soltera de 21 años que buscaba dar a su bebé en adopción tras ser víctima de una violación.
Poco tiempo después, supieron que Angel los escogió para ser los padres adoptivos de su hijo. Emocionados, pagaron a Lee los 25 mil dólares que les pidió, de los cuales ocho mil serían para los gastos de manutención de Angel.
El 23 de junio, Angel tuvo a su hijo. Kyle y Adam lo llevaron a casa y lo llamaron Maxwell.
COMIENZAN LOS PROBLEMAS
En enero del siguiente año, Lee los llamó para decirles que Angel estaba embarazada nuevamente y quería que adoptaran a su bebé. La pareja tenía dudas, pero cedió ante la presión de Lee.
"¿Qué le van a decir a Max cuando se entere de que tuvieron la oportunidad de adoptar a su hermana y no lo hicieron?", les decía. Esta vez, les pidió la mitad de los honorarios y los gastos de Angel por adelantado.
Adoption agencies offer a service that has life-changing consequences for a large sum of money. What happens when the facilitator isn’t telling the truth? https://t.co/nXHsmREg2W— The New Yorker (@NewYorker) October 18, 2021
La pareja pagó los 10 mil dólares y comenzó a preparar un segundo cuarto para la hija a la que llamarían Alexandra. Nuevamente en marzo pagaron otros tres mil dólares.
Sin embargo, Lee les llamó poco tiempo después para decirles que Angel había decidido quedarse con la bebé. El dolor emocional se agravó al no poder recuperar el dinero que habían dado a la agencia.
A los pocos meses, Lee se comunicó con la pareja para decirles que otra persona, una mujer llamada April, quería dar a su bebé en adopción en cuanto naciera. Les advirtió que esta adopción sería más cara: unos 35 mil dólares, de los cuales 15 mil debían pagarse inmediatamente para los gastos de April.
Kyle y Adam aceptaron, pero cada vez se preocupaban más por la situación y por el bebé que, según Lee, nacería en diciembre. Toda la información que habían recibido era una fotografía borrosa de April, además de la noticia de que la madre biológica se negaba a recibir cuidado prenatales.
Cuando decidieron no continuar con el proceso, Lee les dijo que se quedaría con los honorarios y los gastos, unos 14 mil dólares, y lo usaría para la próxima adopción.
La pareja siguió en contacto constante con Lee, quien en octubre les habló sobre una nueva mujer, llamada Renee, que buscaba dar a su hijo en adopción.
Para este entonces, Kyle y Adam habían perdido más de 20 mil dólares en adopciones fallidas, pero Lee les aseguró nuevamente que el dinero invertido iría a este nuevo proceso. Pagaron otros cinco mil dólares y continuaron.
Al principio, el contacto con Renee fue muy bueno y continuo. Pero después les dejó de contestar, por lo que comenzaron a preocuparse y a buscar más información.
Kyle encontró a Renee y a su esposo en Facebook. Tras una búsqueda en la red social, vio una publicación en la que una mujer le daba las gracias a Renee por elegirla para adoptar al bebé.
Fue entonces cuando la pareja decidió confrontar a Lee. Sin embargo, ella les dijo que Renee la había engañado y se negó a devolverles el dinero.
LA VERDAD SALE A LA LUZ
En 2016, Lee había comenzado a colaborar con Talia Goetting, que tenía su propia agencia de adopciones. Ella explicó a The New Yorker que no sabía sobre las acciones de Lee hasta una tarde en octubre de 2018, cuando recibió una llamada telefónica de una madre adoptiva llamada Julie Faulkenberry.
Faulkenberry explicó que Lee la había emparejado con una mujer, Mariah, que iba a tener un hijo y lo quería dar en adopción. Poco antes de la fecha prevista, Lee le dijo que su hijo adoptivo, Elijah, había muerto debido a defectos de salud.
Luego de no recibir los certificados de nacimiento y muerte, Faulkenberry comenzó a sospechar. Llamó al FBI y se puso en contacto con otras familias de Always Hope, de las cuales varias tenían historias similares a la suya.
Mientras tanto, Goetting se puso en contacto con la abogada Maria Pachenko para revisar los archivos y entregó la información que encontró a las autoridades.
LAS ACCIONES DE TARA LEE
En ese entonces, Lee seguía en contacto con Kyle y Adam. Les aseguró que la agencia estaba intentando incriminarla junto con familias adoptivas que estaban enojadas. Kyle le dijo al medio que pensaba que Lee era inocente hasta que leyó las acusaciones contra ella.
Las autoridades afirmaron que Lee había intentado defraudar a las familias, haciéndose pasar por una trabajadora social y de adopción con licencia, cuando en realidad usaba un título universitario falso.
Además, en varios casos, había emparejado a más de un conjunto de padres adoptivos con la misma madre biológica, e incluso con mujeres que no existían.
Más tarde, también se dio a conocer que una mujer llamada Enhelica Wiggins había sido cómplice de Lee y se había hecho pasar por una mujer embarazada en varias ocasiones para continuar con la farsa.
La investigación encontró a 160 familias y a 60 madres biológicas que habían sido defraudadas por Lee. Ella, en cambio, logró ingresar 2.1 millones de dólares con sus mentiras.
La agente se declaró culpable, al final. El juez de su caso ordenó una pena de diez años y un mes de prisión, además de una indemnización de más de un millón de dólares.
FINAL FELIZ
Luego del comienzo de las investigaciones contra Lee, Goetting se puso en contacto con Kyle y Adam para decirles que April nunca había estado embarazada, algo que los devastó.
Tras el arresto de Lee, la pareja consideró ser una familia con un solo hijo. Sin embargo, decidieron hacer una última consulta con otra agencia.
Unas semanas más tarde, recibieron una llamada del director, quien les dijo que una bebé había nacido en un hospital y había sido dada de adopción a última hora. Esa bebé se convirtió en la nueva integrante de la familia.
ACV