Carlos Olvera sale todos los días del edificio en el que trabaja como vigilante en Coyoacán a las ocho de la mañana; desde este lunes, la duración de su trayecto a casa se alteró debido a las obras en ese transporte.
“Nos afectó bastante. Antes hacía hora y media, ahora casi tres”, cuenta a La Silla Rota mientras camina por el andén de la estación Xotepingo, la última en operación.
Desde ahí, debe abordar un autobús de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP), tomar el Metro Taxqueña, luego a otro camión y, con suerte, llegar a casa cerca del mediodía. “Y eso si no hay mucho tráfico o no se tarda el camión”, añade.
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Como él, cientos de usuarios viven a diario el mismo problema porque el Servicio de Transportes Eléctricos de la Ciudad de México (STECDMX) suspendió cinco estaciones del Tren Ligero: Tasqueña, Las Torres, Ciudad Jardín, La Virgen y Xotepingo, como parte de un plan de modernización que durará hasta el 10 de agosto.
Aunque el gobierno capitalino dispuso unidades de RTP sin costo para sustituir el tramo cerrado, el traslado se ha convertido en una travesía de transbordos, filas y estaciones sin condiciones para personas con discapacidad.
Contexto: el gobierno de la Ciudad de México anunció la sustitución de rieles y durmientes del Tren Ligero, así como la renovación del sistema de señalización y drenaje entre Tasqueña y Xotepingo.
La inversión pública asciende a 200 millones de pesos y tiene como objetivo duplicar su capacidad de 110 mil a 230 mil pasajeros diarios, con miras a la Copa Mundial de Fútbol 2026.
Se prevé que el servicio se reanude el 11 de agosto.
Aglomeraciones y esperas
El paso de unidades de RTP, aunque frecuentes, no es suficiente para evitar la saturación. Desde el cierre temporal de las estaciones se han reportado aglomeraciones en las inmediaciones de las estaciones afectadas. En Xotepingo, por ejemplo, los autobuses emergentes salen cada tres a 5 minutos, pero no todas las personas alcanzan lugar.
Desde las escaleras de la estación y en el puente peatonal se forman largas filas que obligan a los usuarios a esperar uno o dos camiones antes de abordar.
Tren ligero en números
Según el INEGI, durante mayo de 2025, el Tren Ligero tuvo un crecimiento de usuarios del 31.8% respecto al mismo mes del año pasado al transportar cerca de 3.1 millones de pasajeros:
- El Tren Ligero ha transportado a 97 mil usuarios, en promedio, todos los días, en 2025, de acuerdo con información del portal de Datos Abiertos de la Secretaría de Movilidad (SEMOVI).
- Hasta mayo de 2025, había transportado a 14 millones 600 mil personas.
- En la ciudad hay una línea Tren Ligero, de 13 km, con 16 estaciones y dos terminales. Cuenta con 20 trenes articulados, cada uno con capacidad de hasta 374 personas y doble cabina de mando
"Voy súper retrasada"
Wendy Bonilla, habitante de Santa Cruz Acalpixca, Xochimilco, salió de su casa a las 5:30 de la mañana rumbo a su trabajo en General Anaya. Antes, su trayecto era de poco más de dos horas. Este martes, llegó casi media hora tarde.
“Es nefasto. Ahorita ya voy súper retrasada. Todavía nos hacen hacer fila y nos retuvieron mucho adentro, es una pérdida de tiempo. Por lo general me hago 30 minutos, ahorita ya voy retrasada por 20 minutos”, dice, molesta.
El tramo cerrado concentra algunas de las estaciones más utilizadas por personas de Xochimilco, Tlalpan y el sur de Coyoacán. La Silla Rota comprobó que Xotepingo y Nezahualpilli se convirtieron en un embudo de gente esperando el RTP o un camión que los lleve hasta el centro de la CDMX entre el tráfico matutino.
Juan Carlos García, quien venía desde el Estadio Azteca rumbo a Izazaga, llevaba más de 15 minutos esperando un camión en Xotepingo. “Ya se hizo tarde. Tardan mucho en pasar”, reclamaba entre decenas de personas más que rodeaban el parabús.
Citas médicas en riesgo
El cierre del Tren Ligero ha puesto en riesgo citas médicas. Lady vino desde Cuernavaca para una consulta en Chabacano. Planeó su llegada con tiempo, pero no contaba con el cierre. A las 8:30 de la mañana seguía esperando en Xotepingo, desesperada.
“No sabíamos de esto. Ya vamos tarde. Nos dijeron que saliéramos por Estadio Azteca, pero todo está lleno”, se quejaba, mientras tomaba un camión sobre Calzada de Tlalpan, que la acercara a una estación del Metro.
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gph