La mañana de este miércoles la Ciudad de México experimentó una serie de movimientos telúricos que, aunque de baja magnitud, fueron perceptibles para muchos de sus habitantes, especialmente en la zona poniente de la capital. Los eventos generaron sorpresa y cierta preocupación, pero afortunadamente, no se reportaron daños.
El fenómeno se describió como una "sacudida rápida" que fue sentida principalmente en las alcaldías Álvaro Obregón y Benito Juárez. Algunos reportes de usuarios en redes sociales también indicaron que se percibió en Coyoacán. Vecinos señalaron que el movimiento fue "fuerte".
Los datos oficiales: ¿cuántos y de qué magnitud?
El Servicio Sismológico Nacional (SSN) de la UNAM confirmó el registro de dos microsismos con epicentro en la alcaldía Álvaro Obregón, específicamente en las coordenadas Latitud 19.36° y Longitud -99.19°, a una profundidad de 2 kilómetros.
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El primer microsismo ocurrió a las 09:30:13 horas (tiempo del centro de México) con una magnitud de 2.4.
Unos segundos más tarde, a las 09:31:15 horas, se registró un segundo movimiento con una magnitud de 1.9, en el mismo punto y a la misma profundidad.
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¿Por qué no sonó la alerta sísmica?
Una pregunta frecuente entre los habitantes fue por qué no se activó la alerta sísmica. Las autoridades, como el C5 de la CDMX, recordaron que la alerta no se activa cuando los sismos son leves o se trata de microsismos, especialmente si su epicentro se localiza dentro de la capital del país.
¿Qué es un microsismo y por qué se produce en la CDMX?
Un microsismo es un movimiento telúrico de baja intensidad que nace y se disemina a través del suelo de la Ciudad de México. Aunque pueden sentirse como una sacudida rápida que se extiende por minutos, no alcanzan la magnitud suficiente para ser considerados sismos mayores.
La Ciudad de México se encuentra en una zona de alta sismicidad. Especialistas explican que la sismicidad en la capital es compleja debido a la geología del Valle de México y los diferentes tipos de suelo estratificados en la cuenca. Por esta razón, el territorio capitalino se divide en tres secciones según su nivel de actividad sísmica:
- Zona de lomas: Terrenos firmes y rocosos en el sur y surponiente.
- Zona de transición: Partes intermedias que cruzan delegaciones como Álvaro Obregón, Cuajimalpa, Azcapotzalco, y partes de Miguel Hidalgo y Benito Juárez.
- Zona de lago: Regiones donde antes se encontraban los lagos de Texcoco y Xochimilco.
La reacción de los 'chilangos'
Muchos habitantes de la Ciudad de México se vieron "sorprendidos" por el microsismo, y la noticia rápidamente se volvió tendencia en redes sociales. Aunque algunos reportes mencionaron pequeñas afectaciones generales, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil de la CDMX estableció comunicación con las alcaldías y no se reportaron incidentes significativos. La gente tiene miedo de lo que podría pasar.
Recomendaciones ante un sismo
Ante cualquier movimiento telúrico, las autoridades siempre recomiendan mantener la calma y seguir las indicaciones.
- Durante el sismo: Ubícate en una zona de seguridad, aléjate de objetos que puedan caer y de ventanas. Si estás en tu automóvil, estaciónate lejos de edificios, árboles grandes o postes. En zonas costeras, busca refugio en áreas altas, lejos de la playa, ríos, arroyos o lagunas. Es crucial emplear las líneas de comunicación solo para emergencias, ya que suelen saturarse.
- Mochila de emergencia: Se sugiere tener una mochila preparada con una linterna, copias de las llaves de tu casa y auto, y un directorio familiar.
- Reportar fallas de alerta sísmica: Si un altavoz no suena durante una activación de la alerta, puedes reportarlo al 911 o a Locatel, proporcionando la ubicación del poste (calle, esquina cercana y colonia) y el ID.
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Los microsismos son una realidad constante en la capital, y aunque estos eventos recientes no causaron daños mayores, sirven como un recordatorio de la importancia de la preparación ante cualquier eventualidad sísmica.
VGB