La estafa de la llanta en malas condiciones en la vía pública ocurre cuando delincuentes simulan o provocan un daño en la llanta de un vehículo para aprovecharse de la distracción de la víctima.
Generalmente, los estafadores alertan al conductor sobre la supuesta llanta en mal estado y ofrecen ayuda, momento en el que pueden robar objetos del auto, exigir un pago excesivo por la reparación o incluso cometer otros delitos.
Esta modalidad de fraude se da en zonas de alto tránsito o en lugares solitarios, aprovechando la confianza o el apuro de los conductores. Para evitar caer en esta estafa, se recomienda revisar personalmente el estado del vehículo, no aceptar ayuda de desconocidos y buscar asistencia en lugares seguros.
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Los estafadores aplican este nuevo fraude en CDMX al hacerles creer a sus victimas que son mecánicos con el modus operandi de la llanta baja, si quieres saber como es que los estafadores pueden consumar este fraude, quédate con nosotros, te contamos todos los detalles y así puedas evitar ser victima de esta estafa.
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¿Cómo es el modus operandi del nuevo fraude en las calles de la CDMX?
Para esta nueva estafa los delincuentes trabajan en grupos para alertar a sus víctimas, que al caer en la trampa son intimidadas y les exigen pagos enormes. Las víctimas avanzan a bordo de sus vehículos y de repente varias personas les advierten de una supuesta falla en sus autos.
En una entrevista para N+, Angélica Gómez González narra la desagradable experiencia, cuando un señor le dijo que la llanta de su carro estaba "baja", posteriormente la víctima comenta que mas adelante otras tres personas le dijeron que su llanta estaba ponchada, para sorpresa de la víctima otras personas también le insisten que su llanta esta en mal estado de forma muy reiterativa, incluso hasta otros carros le indican con gritos que se le va a salir la llanta.
Ante esto y con el temor de que en verdad algo le pasa al vehículo, la víctima se baja a ver la falla, y casualmente aparece de la nada un supuesto mecánico.
Angelica menciona que una persona con overol se acercó informándole que es mecánico, y que si lo requiere el puede ayudarle a revisar el carro, la víctima nota el acento centroamericano del supuesto mecánico que pretende ayudarla.
Para eso la señora Angélica junto con su esposo ya estaban convencidos de que su automóvil en verdad tenía un desperfecto, por lo que acceden a que el mecánico repare la avería e incluso consiga algunas refacciones, aquí es donde comienza el infierno para la víctima.
Lo que sigue es el pago por la supuesta reparación
Angelica narra que todo fue muy rápido y su esposo estaba pisando el pedal con el manubrio volteado, por lo que el estafador que llevó las refacciones, se subió adelante, el primer mecánico estaba sentado al lado de Angelica, que no se percato en que momento se subió al carro por la velocidad en la que actuaron los estafadores. Después de eso la pareja ya debía 58 mil pesos, por la reparación y las piezas que nunca vieron.
La pareja estaba rodeada por los estafadores quienes exigían el pago inmediatamente por las supuestas refacciones que ya le habían puesto a su carro, sin embrago por fortuna de las victimas los delincuentes se distrajeron y esto lo aprovecharon para escapar del lugar. Lamentablemente no todas las victimas corren con la misma suerte ya que hay quienes han pagado montos que van de los 5 mil hasta los 15 mil pesos o más.
¿Qué dicen las autoridades que monitorean casos de fraudes en vía pública?
Francisco Rivas, que es el director general del Observatorio Nacional Ciudadano indica que las cantidades que los estafadores solicitan a sus víctimas son extremadamente variables y que dependen de los recursos económicos de la víctima. Menciona que si la víctima tiene recursos económicos es más fácil que pueda caer y dar una mayor cantidad.
Hasta el día de hoy las autoridades no tienen cifras exactas de cuántas victimas existen en los últimos meses ya que muchos no denuncian, por lo que el problema radica en que si no denuncian las víctimas ante la autoridad, esta puede ser desconocedora de ese problema, asegura Rivas.
Cabe mencionar que a estos estafadores se les ha visto por calles del Centro Histórico, avenida Cuauhtémoc, Viaducto, La Viga y Lorenzo Boturini.
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¿Cómo actuar ante la estafa de la llanta ponchada?
Si sospechas que eres víctima de la estafa de la llanta ponchada, sigue estas recomendaciones para protegerte:
- Mantén la calma y no te detengas de inmediato: Si alguien te señala que tienes una llanta ponchada, sigue conduciendo hasta llegar a un lugar seguro y concurrido, como una gasolinera o una estación de policía.
- Verifica por tu cuenta: Antes de aceptar ayuda de desconocidos, revisa el estado de tu llanta personalmente. Si realmente está dañada, llama a una persona de confianza o a un servicio de asistencia vial.
- No aceptes ayuda de extraños: En muchos casos, los estafadores fingen querer ayudar mientras aprovechan para robar objetos del auto o exigir un pago excesivo por la reparación.
- Mantén las puertas y ventanas cerradas: Mientras revisas la llanta, asegúrate de que tu auto esté cerrado para evitar robos.
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- Llama a la policía si sospechas de un engaño: Si notas que alguien insiste demasiado en ayudarte o actúa de manera sospechosa, repórtalo a las autoridades.
- Revisa antes de subirte al auto: Si ya te detuviste y sospechas de la estafa, revisa que no hayan colocado objetos peligrosos debajo de tu vehículo para evitar accidentes.
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Tomar precauciones y actuar con desconfianza ante situaciones sospechosas puede ayudarte a evitar caer en este tipo de estafas.