Las organizaciones de transporte concesionado de la Ciudad de México solicitaron este lunes un aumento de dos pesos en la tarifa del transporte público y la implementación de un subsidio gubernamental que cubra la diferencia del “costo real por pasajero”, estimado en 15 pesos por viaje.
De acuerdo con Alejandro Luna, representante de la organización Movilidad de Vanguardia (MOVA), esa cifra refleja el gasto total de operación de las unidades, que incluye mantenimiento, combustible, pago de choferes, llantas, impuestos y créditos por unidades nuevas.
“Cuando nosotros decimos 15 pesos es lo que, bajo nuestros costos de operación, nos cuesta trasladar a una persona. Lo que pedimos nosotros de aumento son a la tarifa dos pesos y el subsidio de ese déficit de costo de operación lo tendrá que amortizar el gobierno de la Ciudad de México”, explicó Luna en conferencia de prensa, realizada en el centro de la capital.
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“Costos insostenibles”
Los transportistas señalaron que el modelo actual de financiamiento, basado exclusivamente en la tarifa que pagan los usuarios, se encuentra rebasado. Según datos de MOVA, siete de cada diez empresas enfrentan problemas financieros y la mitad se encuentra en quiebra técnica.
Durante los últimos treinta años, agregaron, el sector ha operado con pérdidas, ya que los ingresos por pasaje no alcanzan para cubrir los costos básicos de operación. “El transporte concesionado ha sido subsidiado por los propios transportistas”, indicó Luna, quien consideró indispensable un nuevo esquema que combine subsidios y pagos por kilómetro recorrido.
Transportistas semana caída en la demanda
Asimismo, los transportistas señalaron que la demanda de pasajeros no se ha recuperado por completo tras la pandemia de covid-19.
De acuerdo a sus datos, durante la emergencia sanitaria, la afluencia cayó al 20% del total de personas transportadas; al levantarse las restricciones, se recuperó hasta 80%, pero desde entonces ha disminuido entre 2 y 3% cada año, afirman.
Los transportistas también señalaron que las proyecciones elaboradas por las autoridades resultaron 30% superiores a la demanda real, lo que agravó el déficit financiero.
El sector atribuye parte de la crisis al crecimiento del parque vehicular. Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) muestran que entre 2023 y 2024 se incorporan entre mil 650 y mil 700 automóviles nuevos cada día en el país.
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Para los transportistas, esta tendencia refleja la falta de políticas públicas que prioricen el transporte de pasajeros y ha derivado en mayor congestión urbana, pérdida de productividad y contaminación.
Transportistas piden subsidio
El sector también recordó que los sistemas de transporte operados por el Gobierno de la Ciudad ya reciben subsidios importantes, por lo que piden que ellos sean incluidos en esta dinámica.
Mencionaron que en el Metro el boleto cuesta 5 pesos, aunque su costo real es de 22 pesos; mientras que en la Red de Transporte de Pasajeros (RTP) el pasaje de 4 pesos cubre solo una parte de los 15 pesos reales que cuesta trasladar a cada usuario.
“Un transporte público eficiente y con tecnología cuesta, y de algún lado debe pagarse, porque la tarifa no lo cubre”, concluyó Luna.