El panteón municipal de Jardín de las Palmas, en Atizapán, Estado de México, es un camposanto de temporalidad sin perpetuidad, los familiares entierran a su ser querido y 6 años después los restos son exhumados para entregárselos o depositarlos en la fosa común.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
SÍGUENOS EN EL SHOWCASE DE LA SILLA ROTA DE GOOGLE NEWS
Te podría interesar
En el Reglamento de Panteones de Atizapán de Zaragoza, la perpetuidad aplica en los panteones de San Mateo, Calacoaya y San Francisco de Asís. En estos 3 camposantos las familias pueden enterrar a sus seres queridos y si cumplen con el pago en tiempo y forma de refrendos anuales adquieren una perpetuidad.
¿Por qué se tiene un panteón de temporalidad?
Con la perpetuidad, los panteones municipales presentan saturación, por lo que en el caso de Atizapán se optó por contar con un camposanto que garantice que las fosas sean reutilizadas.
El reglamento establece que en el caso del panteón que se encuentra en Villa Jardín, al norte del municipio, la perpetuidad no existe, y se maneja como temporalidad.
José, el encargado, administrador y supervisor del panteón Jardín de Las Palmas, confirmó que “una vez que concluye su estancia de 6 años se sacan los restos y son entregados a sus familiares o se depositan a la fosa común”.
Destacó que, en el área metropolitana, es el único panteón que aplica la prohibición de la perpetuidad. “Nosotros limpiamos las fosas una vez que se cumple el tiempo y los restos los llevamos a un osario cuando los familiares no los recogen”.
El panteón Las Palmas se construyó hace unas dos décadas y a la fecha tiene más de 3 mil fosas ocupadas por restos de adultos e igual número de restos de niños, los cuáles deben ser exhumados del lugar cumplidos los 6 años.
¿Qué costos tiene la temporalidad?
De acuerdo con el área de panteones del municipio, tanto para ocupar un espacio con el régimen de perpetuidad o en el panteón Jardín de Las Palmas, los costos son los mismos.
Para poder sepultar a su ser querido, la familia debe pagar los derechos, costo que puede ser de hasta dos mil pesos, dependiendo del lugar y tamaño de la fosa, además de 200 pesos de mantenimiento cada año.
“Depende del espacio en metros que tenga la tumba, la medida estándar que es de 2 metros por 1.50, pagan lo mínimo. Pero hay fosas que ocupan más terreno y esas pagan hasta 2,000 pesos de refrendo más el mantenimiento que son 200 pesos”, explicó el personal de panteones.
¿Qué es la perpetuidad?
El reglamento de panteones establece que la perpetuidad es un régimen de propiedad que permite que los espacios para inhumación sean considerados patrimonio familiar para siempre, pueden ser los espacios para inhumación, bóvedas, osarios y nichos.
La normatividad agrega que el propietario puede tomar decisiones como trasladar restos o enterrar a otra persona en la fosa que le fue asignada, salvo en los casos donde se incumpla con el pago de mantenimiento y derechos.
Para realizar el trámite de inhumación en los panteones municipales de Atizapán, se deben presentar los siguientes documentos: certificación de perpetuidad, recibos originales de la Tesorería Municipal, identificación oficial vigente del responsable de la fosa y domicilio en esta localidad, así como presentar el acta de defunción.
En Atizapán del 31 de octubre al 2 de noviembre, en los cuatro panteones municipales y uno privado, se espera recibir a más de 150 mil personas, por lo que además de la limpieza y mantenimiento de los camposantos, se implementarán operativos para prevenir eventualidades.