Tlalnepantla, Estado de México.- Pozole, tostadas de tinga o pata, frijoles, tortillas, picadillo, guisos con chile, se encuentran entre los alimentos que las personas presas en el Penal de Barrientos, disfrutaran en la comida de este 15 de septiembre con motivo de las fiestas patrias, con sus familiares.
TAMBIÉN LEE: 15 y 16 de septiembre: Este será el menú del TORITO para quién se pase de copas
El reglamento interno del Penal de Barrientos prohíbe el ingreso de algunos alimentos, particularmente los embutidos, pero autoriza introducir en bolsas transparentes de kilo (máximo dos), alimentos preparados por las familias, que este viernes les toca visitar a sus seres queridos que se encuentran recluidos.
Te podría interesar
Esther es una joven madre de dos menores varones de 6 y 8 años, es vecina de Atizapán de Zaragoza, radicada en la colonia 5 de Mayo, su esposo se encuentra sentenciado y está recluido en el dormitorio 8 del Cetro de Readaptación Social de Barrientos, este viernes ella ingresó de 9:00 a 11:00 horas para convivir con él y degustar los alimentos que llevará.
Agua de sabor, pozole, tostadas y verdura, es lo que ella preparó desde este jueves, luego de acudir a las Bodegas de Abasto en Atizapán, donde se surte de frutas y verduras, para llegar puntual con su ropa rosa a la visita.
Te podría interesar
En las temporadas especiales como estas fiestas patrias, los administradores de los 22 Centros de Readaptación y del Centro de Reclusión para Menores, se muestran flexibles y permiten el ingreso de algunos alimentos tradicionales de temporada, según explica.
En el Penal de Barrientos la visita se realiza en días y horarios específicos, dependiendo de la zona de dormitorios, se extiende una credencial que identifica a los familiares (excepto niños y personas adultas mayores) la cual se expide con base en la documentación de identidad de los familiares y de la persona privada de su libertad, como explica el guardia del acceso.
Frente al penal las familias se reúnen, sea para ver de lejos a su familiar interno o para festejarle cumpleaños, una fecha especial, cantarle o mostrarle cartulinas de apoyo como suele ocurrir frecuentemente.
Para otras familias a las que le tocó visita en días anteriores, parte de ellas llevaron el tradicional pozoles, el cual por unos 50 pesos les permiten guardarlos en un refrigerador, para evitar que se eche a perder, y luego tendrá que pagar otros 20 para calentarlo y poderlo comer en estas fechas de Fiestas Patrias.
En el Estado de México hay 22 penales, pero solo en algunos lugares hay reclusión separada de mujeres como las Penitenciarías Femenil Nezahualcóyotl Sur, Otumba Centro y la Penitenciaría Modelo, que son de las únicas que cuentan con dicha separación de los internos y son ellas quienes optar por la preparación de alimentos como parte de su tarea en reclusión.
Sin embargo, en los Centros de Readaptación de El Oro, Cuautitlán, Ixtlahuaca, Ecatepec, Nezahualcóyotl Bordo Xochiaca, Nezahualcóyotl Norte, Otumba Tepachico, Santiaguito, Sultepec, Temascaltepec, Tenancingo, de Tlalnepantla, Tenango del Valle, Texcoco, Zumpango, Valle de Bravo y la Quinta del Bosque, no cuentan con la clasificación necesaria que permitiría a las mujeres el uso de la cocina para preparar los alimentos, salvo las comisionadas.
VGB