CASO IÑIGO ARENAS

¿Por qué no han clausurado el Bar Black Royce de Naucalpan?

Las autoridades sólo han colocado sellos de suspensión en el establecimiento donde falleció el empresario Iñigo Arenas

Escrito en METRÓPOLI el

Las autoridades municipales no han clausurado el centro nocturno Black Royce que funcionaba como restaurante Black Royce, a pesar de que la Fiscalía General de Justicia del Estado de México recabó pruebas periciales de la apertura del negocio a horas no establecidas en la reglamentación local, mientras que este día el Instituto de Salud del Estado de México colocó un nuevo sello se suspensión total de actividades por operar sin licencia sanitaria.

Tres días después de que fue localizado el cuerpo sin vida del empresario Iñigo Arenas el gobierno municipal a través de la alcaldesa Angélica Moya informó que su gobierno intervendría de manera jurídico-administrativa en el restaurante bar Black Royce, una vez que la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) libere el establecimiento.

En esa fecha explicó Moya Marín: “Es un problema muy desafortunado, lamentamos mucho lo sucedido. Tenemos que esperar a ver qué determina la fiscalía, para que nosotros contemos con los elementos necesarios y podamos intervenir con una eventual actuación de la Dirección General de Desarrollo y Fomento Económico”.

 

De acuerdo con el director de Desarrollo y Fomento Económico Ignacio Espinosa, el Black Royce operaba desde el 2018 y cada año había revalidado sus licencias como restaurante bar, hasta 2023, con un horario de cierre a las 2:00 horas del día siguiente.

No obstante, y con base en el seguimiento y rastreo de la ruta que llevó el empresario de 41 años de edad que realizó la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, Iñigo Arenas arribó al lugar

Según datos de la FGJEM el hombre salió del bar La República en Polanco, CDMX, casi a las 3:00 horas del 6 de agosto, luego a bordo del vehículo de transporte público con cromática de esa entidad y matrícula A-5915-M, luego minutos más tarde llegó al Black Royce en Naucalpan, Estado de México. Es decir, fuera del horario establecido con base en la licencia de funcionamiento de restaurante bar.

“Sin embargo, por lo que ha salido a la luz, el tipo de actividades que realizaban era de un centro nocturno. Hasta que se haga la investigación y tengamos las pruebas correspondientes, podremos proceder de manera jurídico administrativa”, insistió el funcionario municipal.

Habló entonces de la posible sanción que, según dijo el 9 de agosto, que se podría proceder con una suspensión, una amonestación, “que no creo que sea el caso”, una clausura definitiva o revocación de la licencia correspondiente. Lo que no se ha hecho.

Este miércoles personal del Instituto de Salud del Estado de México acudió a colocar un nuevo sello de “Suspensión”, aplicable a la totalidad del centro nocturno con licencia de restaurante bar Black Royce.

La semana anterior, el 7 de agosto, el personal de ISEM acudió a colocar un sello donde se solicitaba la presencia del representante legal o propietario del negocio para que mostrara el permiso sanitario de venta de alimentos y bebidas, dando un plazo de 3 días, sin embargo, nadie acudió, por lo que este día se acudió a la colocación del sello de suspensión total de labores, el cual implica una sanción con base en el Libro 5 de la Ley de Ingresos y Egresos del Estado de México.

La semana anterior el gobierno municipal realizó la clausura de 7 establecimientos por operar fuera del horario establecido y por diversas irregularidades, entre ellos, un local comercial sin nombre de la avenida Revolución en Mártires de Río Blanco; un local sin nombre en un domicilio particular de la calle Sierra Morena en colonia Vicente Guerrero; un establecimiento denominado Olimpia, en Los Cuartos; otro local sin nombre instalado en una casa de la calle Río Bravo, en México 86. Y en Ciudad Satélite fueron suspendidos los establecimientos ‘La que Manda’, en Pafnuncio Padilla, así como Frankfurt y La Cervecería, de la calle Federico T. de la Chica en este municipio. Sin embargo, el Black Royce siguen intacto para las autoridades municipales. 

Por la clausura del inmueble y la detención de los empleados que habrían participado en el homicidio del empresario Iñigo Arenas, el martes anterior trabajadores de distintos bares de Naucalpan acudieron a las inmediaciones del Juzgado Penal de Barrientos donde realizaron una inusual protesta con meseras que al unísono corearon “somos meseras, no somos goteras” a la vez que exigían justicia ya que 4 de sus compañeras Aritzi Abril “N”, Ana Karen “N”, Cecilia “N”, Ana Karen “N N”, y sus compañeros Eduardo “N” y Carlos Daniel “N”, quienes fueron vinculados a proceso tras una maratónica audiencia de más de 12 horas.

En audiencia celebrada el martes, el Ministerio Público aportó más pruebas contra los seis empleados de Black Royce detenidos bajo Prisión Preventiva Justificada en el penal de Barrientos, por su posible intervención en el delito de homicidio del hombre de 41 al interior de dicho bar.

Afuera del Juzgado familiares de Aritzi Abril “N”, Ana Karen “N”, Cecilia “N”, Ana Karen “N N”, Eduardo “N” y Carlos Daniel “N”, denunciaron que habrían sido torturados para que declararan.