TALA CLANDESTINA

Talamontes huyen a Morelos y Edomex; no podemos seguirlos: Corenadr

La titular de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural, Columba Jazmín López, destaca que al inicio de su administración había 45 aserraderos, hoy estima que quedan 6

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Ir tras los talamontes clandestinos en la Ciudad de México no es tarea sencilla. Realizan su actividad delictiva en las fronteras de la capital y cuando autoridades van tras de ellos, escapan hacia el Estado de México o Morelos, donde ya no pueden ser perseguidos, explica en entrevista con La Silla Rota la titular de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corenadr), Columba Jazmín López.

“Entonces por un lado sí tienes talamontes, donde la mayoría o son del Estado de México o de Morelos, son de otros estados, entonces cuando ellos pasan la frontera de la ciudad pues a la hora de salir por ellos se vuelven a meter a internar al Estado de México o Morelos y no tenemos jurisdicción para seguirlos y nos quedamos a la vera frontera y ya se nos pelaron”, describe la titular de la Corenadr.

A ello se suma que el delito no es investigado por la Fiscalía General de la República (FGR), pese a que hay carpetas de investigación elaboradas por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), con datos proporcionados por la Comisión.

“Hay mucha especulación y quien tiene que entrar aquí a detener y hacer los trabajos ya más en serio, como más fuertes, más penetrantes es la parte de la Fiscalía General federal”, expresa la funcionaria capitalina.

Columba Jazmín López se queja de que ha visto en medios de comunicación que a veces las críticas por no detener talamontes son contra su labor, pero expone que ella no es policía para ir detrás de los presuntos delincuentes o para hacer más investigaciones.

“Siempre dicen Corena y ponen mi nombre completito y que yo no hice nada. ¿Yo soy policía?, me pregunto yo”, ironiza.

“Nosotros tenemos denuncias, las tiene la Profepa, si ya las tiene el siguiente paso es que lo vea con la fiscalía federal y hay que ver en qué área atienden la tala”, añade.

Los ciudadanos también tienen responsabilidad 

Otro elemento que se suma al problema de la tala de árboles de manera clandestina es que los comuneros que son propietarios de la tierra la venden y luego, cuando ven que hay tala inmoderada se quejan, pero olvidan que ellos mismos la vendieron.

“Creemos que toda la culpa la tiene el gobierno pero los ciudadanos también tiene una responsabilidad. Si paramos la venta de terrenos vamos a parar tanto la tala como el caminar de los asentamientos en las zonas de Xochimilco. Ellos también se desdoblan, dicen que hay un desdoblamiento natural pero también venden, entonces pues ahí tenemos que hay gente que necesita espacio para vivir y les compra, ese negocio pues también lo utilizan de repente para decir que las tierras que están talando”, continúa.

Pide detener la venta de terrenos. Sugiere hablar con los representantes de núcleos agrarios para que a través de las asambleas comunales y ejidales se detenga la venta de predios.

“El crecimiento natural es una cosa, pero la venta indiscriminada de terreno es mucha, tenemos en Topilejo mucha, en Ajusco se han estado aplicando y deteniendo la tala”, compara.

El tema de la tala se puso en la agenda de medios de comunicación luego de que habitantes de Topilejo, Tlalpan, se quejaran a través de un bloqueo de la tala clandestina, pero esta administración ha cerrado varios aserraderos, asegura la titular de la Corenadr.

“En términos de facultades, apenas el 19 de enero de este año me trasladaron las responsabilidades de la vigilancia ambiental y todos los días hemos estado haciendo recuperaciones o hemos estado haciendo patrullamientos para la tala o hemos estado cerrando aserraderos”, afirma.

“Cuando nosotros llegamos había más de 45 aserraderos, hoy por ejemplo, se cerraron 3 aserraderos. Yo creo que por lo mucho debe de haber tres o cuatro más en la Ciudad de México en la parte de Tlalpan y hay dos en Milpa Alta”.

Reitera que la madera principalmente sale a los estados vecinos de Morelos y Estado de México y ahí hay un problema.

“Duele mucho y debemos hablar con los propietarios para que no se cambie el uso de suelo y con los gobiernos del Estado de México y Morelos para que hagan algo y que la fiscalía federal intervenga”, concluye. 

MRV