Toluca, Estado de México.- Recostada en la mesa de operaciones, Barbitas lucha por su vida. Es una perra callejera que fue atacada por sujetos armados cuando estos asesinaban a nueve personas e incendiaban locales en la nave H de la Central de Abasto de Toluca.
Barbas, o Barbitas, con sus orejas negruzcas y el pelaje dorado, nació y creció en las naves de la central, ahí los locatarios la alimentaban. Por ello, cuando el grupo armado irrumpió, comenzó a ladrar.
El ruido desesperó a los atacantes y le dispararon en dos ocasiones en las patas, aun así, cuando Barbitas vio el fuego que calcinó los cuerpos de ocho personas y generó quemaduras graves en una pequeña y en un hombre, salió corriendo.
El rescate de Barbitas en la Central de Abasto
La perrita se resguardó en el área de estacionamiento, ahí permaneció inmóvil por más de ocho horas, con la sangre escurriéndole por las patas, hasta que los Bomberos de Toluca la rescataron y la canalizaron a un veterinario.
Ahí fue cuando Ángel Fernando, uno de sus cuidadores de la Central de Abasto de Toluca, decidió alzar la voz e iniciar una colecta para salvarle la vida a la peluda de la nave H.
A través del llamado en redes sociales, la asociación Guerreros Caninos, que se dedica al rescate de los peludos en situación de vulnerabilidad o violencia, entró en escena.
Malú Roldán, vicepresidenta de la asociación, señaló que ya fue canalizada a una clínica veterinaria en donde se le extirpó una bala que aún tenía alojada en la pata, por lo que están a la espera de que reaccione a los antibióticos y se le puedan salvar las extremidades afectadas, pues ya desarrolló una infección por las heridas.
“Se le van a realizar otras radiografías y se va a tomar en cuenta el punto de vista de un traumatólogo ortopedista”, comentó la rescatista.
Pero no es sencillo salvar la vida de un peludo, la realidad es que los recursos económicos escasean cuando de realizar esta actividad altruista se trata, por lo que se lanzó una colecta para apoyar a Barbitas.
“En nuestras redes de Guerreros Caninos está nuestro número de cuenta y también en la clínica Intermédica Veterinaria Pet, ubicada en la calle de Quintana Roo, pueden dejar su donativo en efectivo o en especie”.
Para el caso de la peluda de la Central de Abastos se necesita algodón plisado, vendas del 10, pañales predoblados, gasas y medicamentos.
¿Qué sigue para la peluda de la central?
Si Barbitas sobrevive a la infección y le salvan las patas, comenzará el protocolo para ponerla en adopción, pues al ser una perrita callejera, no tiene vacunas y mucho menos está esterilizada.
“Tiene entre dos y tres años, es una perrita muy tranquila. Es mediana y queremos encontrarle una familia que la ame, por desgracia el joven que la encontró nos dijo que no la pueden adoptar, fue muy sincero, por eso nuestra meta es encontrarle un hogar”.
Entonces la moneda aún está en el aire, Barbitas lucha por su vida y por la oportunidad de ser parte de una familia que comprenda completamente lo que es una tenencia responsable pues la peluda sobrevivió a un acto de violencia que acabó con la vida de nueve personas, entre ellas, tres niños.
MRV