Xóchitl Gálvez porta credenciales como la “niña terrible” en un estrato importante de la política mexicana, donde ejerce casi a partes iguales su derecho a disentir, incluso de sus aliados, y su destreza a echar mano de majaderías cuando decide tomar postura o enfatizar una idea.
“SI conectas con la gente, no necesitas tanto dinero para ganar una elección…Aquel que gana sólo porque tiene mucho billete, es un pendejo…”, expuso en entrevista con La Silla Rota.
Gálvez Ruiz (Hidalgo, 1963) es senadora por el PAN, pero no está afiliada a ese partido. “Vivo con mi marido desde hace 30 años, sin acta de matrimonio de por medio”, dijo. No necesito documentos para ser fiel, solidaria, comprometida. He visto a muchos que ´presumían´ de su militancia partidista, pero cualquier día amanecieron en otro partido”.
La que fuera una disruptiva candidata a gobernar Hidalgo (2010) y alcaldesa en la comuna capitalina de Miguel Hidalgo (2015-2018), se sumó a la campaña de Alejandra del Moral, aspirante de la alianza PRI-PAN-PRD a la gubernatura del Estado de México, y abriga sus propias convicciones sobre la contienda electoral que se dirime en la entidad:
“Sin que nadie me lo pidiera, caminé Tlalnepantla y Ecatepec para conversar con miles…creo que las encuestas no están reflejando la realidad: hay un voto oculto que hará más cerrados los resultados entre Alejandra y Delfina (Gómez, abanderada de la coalición encabezada por Morena)”, indicó.
Aceptó que Del Moral es una figura estrechamente ligada al PRI, y adelantó una reflexión con vista a los comicios que habrá justo en año más para renovar, entre miles de posiciones de elección, la presidencia de la República, el Congreso federal y los gobiernos de nueve entidades federativas, incluida la ciudad de México, posición a la que ella busca postularse.
“En el Estado de México se apostó por alguien hondamente identificado con un partido. Lo que resulte de ello impactará en la decisión de los partidos sobre los perfiles que postulen en el 2024: gente con “pedigrí” partidista, o aquellos que tengan un origen más ciudadano”.
Concordó con que la política mexiquense ha expresado durante décadas la confrontación entre PAN y PRI como supuestos antípodas en sus respectivas visiones y propuestas, pero ahora marchan aliados. “Creo que nos ha faltado explicar a la gente por qué estamos juntos… demostrar que en unos años Morena se convirtió en lo que representó el viejo PRI”.
Refirió igualmente que en el Estado de México siempre se hizo política desde el poder con mucho dinero, pero aseguró que ahora no es el caso. “La cartera abierta hoy es la de los gobiernos de Morena. Ahí están metidísimos, con sus enviados y dinero público, Claudia (Sheinbaum, gobernante de la ciudad de México), Cuitláhuac (García, de Veracruz) y Cuauhtémoc (Blanco, de Morelos)”.
Extractos de la primera parte de la entrevista con Xóchitl Gálvez
Pregunta (P): Debe ser difícil explicar en el Estado de México una alianza entre PRI y PAN, dos viejos enemigos…
Respuesta (R): Pues sí… El PRI ha gobernado este estado demasiados años, pero yo traté de explicar lo que representa el gobierno de Morena y específicamente Delfina (Gómez). Ella no abrió la boca cuando fueron suprimidas las estancias infantiles. Un programa que ayuda mucho a las mujeres, a madres solteras, a trabajadoras del hogar, que no tienen con quién dejar a sus hijos… Pero para mí lo más grave es cuando desaparecen las escuelas de tiempo completo. Y eso sí se lo adjudico a Delfina directamente. Yo le decía a la gente: Es tan grave lo que ha hecho Morena que hay que juntarse. Estuve en Ecatepec, donde gobierna Morena. Es una tierra sin ley. La gente trata de ladrón al alcalde…no lo quieren ni los morenistas.
P: En el 2021 hubo un voto en contra de Morena en esa zona metropolitana, igual que en la ciudad de México, con un revés muy importante contra Morena. ¿Hay una simbiosis política entre esos municipios conurbados y la capital del país?
R: Hay un voto oculto, un voto que Morena cree que es suyo. Pero existe desencanto de una clase media que le gusta trabajar y rechaza la inseguridad, por ejemplo, que es un problema tremendo en el transporte público. Y la gente no sabe a ciencia cierta si le toca al gobernador o al presidente, pero siente que no se ha hecho lo suficiente. Si esa gente enojada da un voto de castigo a Morena, puede haber sorpresa. Pero si la gente enojada no sale a votar, el escenario será favorable a Morena.
P: Hay voces en el PRI mexiquense en el sentido de que el PAN no mostró suficiente compromiso en la campaña de Del Moral. Algunos reclamos se concentran en uno de los dirigentes panistas más importantes, Enrique Vargas. ¿Cómo fue el nivel de compromiso que tuvo el PAN?
R: Voy a cometer una indiscreción. Me tocó un evento donde hubo un debate por parte de los operadores de Alejandra sobre si hablaba o no Enrique Vargas. Estas tarugadas las tenemos que superar.
P: Alejandra del Moral es una priísta “de hueso colorado”, si bien de perfil joven y mujer. ¿Hacia 2024 seguirá siendo viable este tipo de figuras con sello partidista, o se abrirá paso el perfil ciudadano?.
R: Esa fórmula se va a poner a prueba el domingo y ahí vamos a saber si la alianza (PRI-PAN-PRD) realmente trae el empaque que creemos que trae (…). Si Alejandra gana, va a animar a muchos de “pedigrí” de los partidos del PRI y del PAN, que van a decir: “esta alianza es de nosotros”. Pero si no fuera un resultado favorable, los partidos estarán obligados a repensar si la alianza tiene que ser mucho más con los ciudadanos, no solo que los traigas a los mítines, sino que realmente escuches a los ciudadanos en sus propuestas.
P: Particularmente en el Estado de México, con enormes presupuestos públicos, la política siempre se hizo con mucho dinero. El achicamiento del PRI debilitó en esta ocasión tal posibilidad. ¿Aprendieron a hacer campaña efectivas y sin tanto dinero?
R: En esta campaña no hubo esas cantidades de dinero por parte de nosotros. Pero sí las tuvo Morena. Por ejemplo, Claudia (Sheinbaum) está metidísima en el Estado de México. Hay una movilización fuertísima de empleados de la Ciudad de México hacia allá, y yo supongo que de recursos públicos (…). Y está la sensación también de que el gobernador (Alfredo del Mazo) tiene los brazos caídos. Bueno, ojalá que los gobernadores de Morena siguieran esos pasos y no se metieran. Pero no está bien que sí se meta Claudia, y sí se meta Cuitláhuac (García), y se meta Cuauhtémoc (Blanco). De eso los mexicanos ya se hartaron, del uso de dinero público para beneficiar a un candidato. Yo siempre dije: ´cuando un candidato gana por dinero es muy pendejo, porque no fue capaz de emocionar a la gente. Yo vi a una Alejandra (del Moral) al principio, y a otra Alejandra al final de la campaña: chingona, empoderada, valiente. Sí logró transmitir su visión.
(Este reporte contó con la colaboración de Tania Aguilar).