Metepec, Estado de México.- Atravesar la selva, caminar más de 16 horas al día, comer una vez cada 24 o 48 horas, andar con la mente fija en el sueño americano para sobrevivir a la pesadilla latinoamericana... Así andan miles de migrantes venezolanos quienes buscan escapar de la crisis económica de su país natal, entre ellos muchos niños.
Para lograr su meta, llegaron al refugio Hermanos en el Camino ubicado en el municipio de Metepec, donde ya pernoctan más de 70 migrantes y esperan que la cifra aumente; sin embargo, el santuario para los migrantes se ha quedado sin recursos por parte de organismos e instituciones gubernamentales, por lo que lanzaron un llamado a la sociedad civil con la finalidad de poder extender la ayuda a quienes deciden migrar.
Para Armando Vilchis, director del refugio, el éxodo venezolano ha incrementado en 100 por ciento la ocupación del lugar.
"El gobierno del estado nos estaban dando, pero ahorita nos suspendieron hace dos meses las despensas que nos estaban dando, prácticamente estamos abandonados; el municipio ni en cuenta tampoco, con esto no se cuenta, al contrario, nos perjudican en lugar de ayudarnos".
Pero, como pocas veces, la mayoría de los migrantes son menores de edad. Niños desde 5 años quienes caminan hacia la promesa de sus padres de poder tener una mejor vida y que enfrentan la violación de los derechos humanos en su travesía hacia Estados Unidos.
"Para echarme la caminata, para mí fue incómodo, para uno no tener qué comer... solamente comíamos en la noche, a veces nada más arroz o espaguetti y para pasar los ríos que nos podían llevar, vimos el montón de muertos eso fue lo difícil", comentó Alejandra, de 11 años.
"Vi muertos, vi monos, vi animales... Yo le dije a mi mamá que yo no voy me voy a cansar en la selva y no me cansé, mi mamá después se cansó y yo no", añadió Danny, de 5 años.
"De Venezuela salí hace como dos meses. Caminamos mucho, cada día pasábamos ríos y había muchos muertos, la verdad es que yo vi muchos muertos y menos mal que nosotros caminamos mucho, somos guerreros, Dios nos ha cuidado", explicó Daniré, de 7 años.
Las condiciones de riesgo del Tapón del Darién y la violación de derechos humanos por parte de autoridades mexicanas han convertido el sueño americano en una tragedia para quienes deciden buscar mejores oportunidades caminando, es por ello que se lanzó un exhorto para apoyar a los migrantes y el santuario que han encontrado en Metepec.
"Necesitamos aceite, café, azúcar, papel de baño que es lo que más se ocupa y todas las cosas enlatadas que necesitamos nosotros aquí para poder hacer una comida, una cena, un desayuno".
Asimismo, se pidió al sector salud que no discriminen a los migrantes y se les brinde atención médica pues muchos llegan con heridas o enfermedades y no cuentan con atención médica oportuna.
El calvario de los migrantes en México
Los migrantes de centro y Sudamérica se enfrentan a un sinfín de peligros durante su camino y también en México, en donde son víctimas de discriminación, violaciones a sus derechos humanos y en algunos casos, hasta han muerto. Esta grave situación se vivió en la estación migratoria de Ciudad Juárez, Chihuahua, donde murieron 40 migrantes en un incendio.
El incendio se registró el pasado 27 de marzo, en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración (INM) ubicadas en el Puente Internacional Stanton-Lerdo en Ciudad Juárez, Chihuahua, en donde comenzó el fuego y según se observa en los videos dados a conocer, el personal de la estación no hizo nada por salvar a los migrantes.
MRV