Desarmado, al parecer confiado en que su vida no corría peligro entre la gente, Julio César Soto Meza, importante miembro del Cártel de los Arellano Félix (CAF), estaba en el Starbucks de Plaza Carso, cuando un matón se le acercó y le disparó varias veces en la cabeza; enseguida el sospechoso salió del centro comercial presuntamente acompañado de al menos un cómplice que sirvió de “muro” y escaparon a bordo de motocicleta.
Sin embargo, este asesinato presuntamente prepetrado por orden del Cártel de Sinaloa, es atípico en la colonia Ampliación Granada, donde se ubica Plaza Carso, ya que según datos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, no se registró ningún otro homicidio en esta zona de la alcaldía Miguel Hidalgo durante 2022 ni en los primeros dos meses de 2023.
El asesino cometió el crimen en ese lugar de la exclusiva zona de Polanco de Ciudad de México, a la hora de la comida, frente a decenas de testigos y cámaras de seguridad, sin importarle la presencia en el inmueble y en el exterior de policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) ni de vigilancia privada.
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Informes de inteligencia revelan que aparentemente el Cártel de Sinaloa había puesto precio a la cabeza de Julio César, de 42 años de edad, tras responsabilizarlo del homicidio en 2022 de Víctor Hugo Mejía López, alias “El Griego”, uno de los líderes de la organización criminal en Tijuana, Baja California, por lo que autoridades capitalinas indagan si la orden realmente provino de una de las facciones de este grupo.
Además, investigan por qué el sicario y su acompañante optaron por asesinarlo en uno de los lugares más emblemáticos de la capital del país, pese al riesgo que implicaba por la vigilancia pública y privada que existe en la zona.
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A diferencia del asesinato en 2019 de dos israelíes en un restaurante de la también exclusiva Plaza Artz, la policía capitalina no tuvo tiempo de reacción; en aquella ocasión, la SSC logró capturar en la calle a una mujer que participó en el doble crimen, incluso captó, a través del monitoreo de cámaras de seguridad, el momento en que intentó deshacerse de la peluca y ropa con la que se disfrazó.
Julio César Soto Meza llegó la tarde del 20 de abril de 2023 a Plaza Carso, sin arma alguna y presuntamente sin escolta. Era la hora de la comida y en la zona de restaurantes había bastante gente. Se indaga la versión de que había quedado de ver a una persona en el Starbucks. De pronto, alrededor de las 15:11 horas, un hombre de gorra, cabello largo y mochila al pecho, sacó una pistola y le disparó varias veces en la cabeza.
De acuerdo con la investigación, el asesino no iba solo, pues al menos un cómplice lo cuidaba, discreto, pero armado; ambos estaban dispuestos a matar a quien tratara de detenerlos, ya fueran civiles o policías. Luego del crimen, los dos sicarios lograron escapar a bordo de motocicletas.
El cuerpo de la víctima cayó debajo de la mesa, entre las sillas, y el pánico se extendió de inmediato entre la gente que estaba en el lugar; muchas personas se tiraron al piso, tratando de protegerse de lo que creyeron era una balacera, mientras otros se resguardaron en diversos negocios, baños y otros lugares.Las redes sociales se encendieron de inmediato con el hashtag #Polanco e imágenes del cuerpo sin vida, así como de personas desesperadas, angustiadas.
El panorama criminal en la zona de Plaza Carso
Aunque cuando ocurrió el asesinato en Plaza Carso se desataron también las búsquedas de Polanco, este centro comercial no se ubica en esa colonia, sino en la Ampliación Granada, en la alcaldía Miguel Hidalgo.
De acuerdo con datos de las carpetas de investigación de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, durante 2022 y los primeros dos meses de 2023 se abrieron 337 carpetas de investigación por diversos delitos en la colonia Ampliación Granada, pero ninguna de ellas por homicidio.
Según se muestra en los datos abiertos de la Fiscalía, en 2022 se abrieron 279 carpetas de investigación por crímenes perpetrados en la colonia Ampliación Granada, mientras que entre enero y febrero de 2023 la cifra fue de 58.
El mayor número de carpetas de investigación por delitos en esa colonia de la alcaldía Miguel Hidalgo fue por fraude, con 63 casos; seguido por el robo de objetos, con 33; robo de objetos al interior de un vehículo, con 24, y hubo también 20 casos de violencia familiar.
¿Quién era el miembro de los Arellano Félix que fue asesinado?
Informes de la SSC señalan que Julio César Soto Meza era integrante del Cártel de los Arellano Félix y su bastión era la colonia Los Pinos, en Tijuana; era un acérrimo rival del Cártel de Sinaloa, particularmente de Los Chapitos, con quien disputaba el control del trasiego de droga y otras actividades ilícitas en Baja California, particularmente en esa ciudad fronteriza.
Sus enemigos le atribuyeron la responsabilidad en el asesinato de Víctor Hugo Mejía López, alias “El Griego”, lugarteniente del Cártel de Tijuana en Sinaloa, de ahí que una venganza por este crimen es una de las líneas de investigación de la SSC y de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalinas.
“El Griego” sobrevivió a un atentado en Tijuana y huyó a San Luis Rio Colorado, Sonora, donde el 26 de marzo de 2022 fue acribillado en un restaurante de mariscos.
En contraste con Julio César Soto Meza, quien portaba una credencial del INE con su nombre y estaba desarmado al ser asesinado, Víctor Hugo Mejía López llevaba una pistola y una identificación falsa.
Minutos después del homicidio en Plaza Carso, se dieron a conocer datos de Julio César, quien en 2020 fue detenido en Venezuela por tráfico de drogas por la Guardia Nacional Bolivariana, pero tenía antecedentes penales desde 2013 cuando fue arrestado por narcotráfico, mientras que en 2015 fue investigado por delitos contra la salud.
El titular de la SSC, Omar García Harfuch, informó que este hombre contaba con una orden de aprehensión en Oklahoma por tráfico de drogas, y contaba con “flujos migratorios frecuentes a Panamá, Cali, Colombia y San Diego, California”.
La Coordinación General de Investigación de Delitos de Alto Impacto de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Ciudad de México asumió la indagatoria por tratarse de un homicidio del fuero común, por lo que la Fiscalía General de la República (FGJ) no ha intervenido en las pesquisas.
Horas después, en redes sociales circuló un video en el que el cuerpo del integrante del CAF es levantado, dejando un enorme rastro de sangre en el piso, y colocado en una camilla para ser trasladado de Plaza Carso al sitio donde se le realizó la necropsia, a la espera de que sus familiares lo reclamen para sepultarlo o cremarlo.
MRV