Tultitlán, Estado de México.- Al menos dos altares, sitios donde se realizaban rituales o misas negras, fueron encontrados el fin de semana y este lunes en las inmediaciones de la Sierra de Guadalupe donde senderistas encontraron figuras negras con cabeza de cabra, veladoras de varios colores, ropa, objetos personales y dibujos relacionados con el esoterismo.
El anterior Sábado de Gloria, mientras varias personas realizaban una caminata por el llamado Pico del Fraile en el ascenso a la Sierra de Guadalupe, calle Zacualpan colonia Solidaridad en Tultitlán, cuando encontraron entre unas rocas, un primer santuario, se trataba de una figura alada con cabeza de cabra y cuernos largos, al pie de esta había diversos objetos, entre veladoras y objetos personales como ropa y bolsas negras de plástico.
El hecho fue denunciado a las autoridades; sin embargo, poco se puede hacer debido a que no hay argumento para proceder legalmente debido a la libertad de culto, no hay animales en sacrificio y no hay denuncia de personas que se digan afectadas, según declaró personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.
Una segunda figura de una cabra con cuernos largos, alada y que permanece sentada, fue localizada por senderistas quienes reportaron el hecho a las autoridades, para su conocimiento y legal proceder. Esta segunda figura fue localizada en la llamada “Cueva del diablo”, en el interior había veladoras de diversos colores, copas y vasos con líquido al parecer agua, ropas, cadenas y otros objetos.
El hecho causó consternación entre los lugareños, quienes sienten temor por ambos altares, cuyas figuras no han sido retiradas, pese a las denuncias hechas por varios de los habitantes y consejo de participación de la colonia Solidaridad.
Los lugareños fueron exhortados a mantener distancia por el riesgo que puede implicar el acercarse al lugar, sobre todo en las noches, cuando se supone realizan estas actividades esotéricas.
En este municipio se encuentra instalada la figura de la Santa Muerte más grande del continente con 22 metros de altura y una base de 6 metros, la cual fue realizada con fibra de vidrio, misma que es visitada por miles de personas quienes le rinden culto a la Santa Muerte o la “Niña Blanca” como también le llaman.
Esta figura de la muerte se encuentra al lado de la Vía López Portillo, por Fuentes del Valle Tultitlán, se inauguró el 28 de diciembre de 2007, por el entonces comandante Pantera (Jonathan Legaria Vargas), quien fue asesinado la noche del 31 de julio de 2008 en los limites entre Coacalco y Ecatepec, cuando la camioneta donde viajaba fue baleada, según se describió en medios locales de la fecha.