Son las 8:40 de la mañana sobre Avenida Paseo de la Reforma, a un lado del convento de San Hipólito y a unos pasos de la entrada al Metro que conecta a las concurridas Línea 2 y 3. En la estación Hidalgo del Metrobús hay una fila enorme de usuarios que buscan subirse a las unidades de dos pisos, rumbo a la Fuente de Petróleos, pero pasando por Insurgentes, el Ángel, la Diana y Auditorio.
Es la hora pico y algunos pícaros conductores en autos particulares se meten al carril exclusivo del Metrobús para ganar tiempo. Lo único que consiguen es entorpecer el tránsito de la céntrica avenida y hacerse acreedores a una multa.
Un operativo puesto en marcha este 29 de marzo por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México los detiene uno por uno. Luego de que los agentes les piden su licencia y su tarjeta de circulación, les informan que serán multados por invadir el carril confinado del Metrobús.
Casi todos los multados saben que no deben usar el carril exclusivo del Metrobús, pero también se justifican de diversas maneras. Alegan que otros policías atrás les permitían usarlo, que hay mucho tráfico. Otros buscan escabullirse de la multa, como uno que dijo que era influyente, pero que cuando un agente policíaco le dijo que había un medio de comunicación grabando, se desdijo.
Buscan disuadir a los invasores del carril del Metrobús
El operativo no es un capricho de la autoridad. Busca sancionar a quienes toman ventaja y usan el carril exclusivo del Metrobús, que se diseñó así para que los hasta 240 pasajeros que viajan en cada unidad de la Línea 7 lo hagan rápido y sin obstáculos. Pero los autos particulares e incluso los del gobierno al usarlo toman ventaja y no ayudan a la movilidad, pues en esos vehículos viajan una, dos, tres personas, quizá cinco y no más.
Cuando los automovilistas a lo lejos ven el operativo, intentan dejar el carril confinado y meterse a los carriles destinados para ellos. Pero ya los policías los tienen detectados, les toman fotos y cuando están cerca de la estación los detienen, incluso si van a un carril más alejado.
Otros de plano se siguen por el confinado, pero deben detenerse detrás de las unidades de dos pisos de la Línea 7 del Metrobús. Ahí son abordados por los policías. Algunos de ellos fingen sorpresa, desconocimiento de que el carril confinado no es para ellos.
A unos les sale bien el intento de engaño, a otros se les desencaja el rostro al sospechar la multa que se avecina. Los menos se enojan. Los motociclistas son aparte. Voltean para todos lados, buscando una ruta de escape y al ver que no hay, ponen carotas, remarcadas por sus cascos.
Algunos conductores se niegan a dar documentos
Pero los que más llaman la atención son los conductores los que juran y perjuran que desde calles atrás hay policías que les dan permiso de usar el carril confinado.
Uno de esos conductores se obstinó y cuando el Inspector jefe de la Subsecretaría de Tránsito de la SSC, Omar Machuca le pidió sus documentos, se negó a mostrárselos, pese a saber que había cometido una falta.
La razón para no dárselos, explicó él mismo conductor a La Silla Rota, fue que el policía no se había identificado. Pero Machuca sí lo hizo y le explicó por qué le pidió sus documentos. Para evitar alguna falla, grababa todo.
Los pretextos de los invasores del carril del Metrobús
El automovilista, quien no quiso revelar su nombre, no dio su brazo a torcer ni cuando se le informó que, en caso de continuar su negativa, su auto sería llevado a un depósito vehicular, o sea un corralón. Mientras se realizaba esa plática, en el segundo carril, los vehículos que iban atrás pitaban y pitaban. En el carril del Metrobús continuaba la caza de infractores.
Al preguntarle al conductor por qué usó el carril confinado, respondió que porque del lado de la lateral no lo dejaron pasar.
“No te dejan pasar porque no sé, traen mucha prisa o lo que sea”, dijo titubeante.
Reconoció que él sabía que no se podía meter al carril confinado. “Claro”, pero invitó a ver cuadras atrás lo que calificó de “relajísimo donde se meten todos”, agregó.
“¿Sabes qué es lo peor?, que los mismos policías te dejan pasar”. Aclaró que sí llevaba consigo su tarjeta y licencia. Pidió a los policías actuar con “sentido común”.
Admitió que es la primera vez que le toca un operativo así. Se resignó a que la multa iba a ser cara.
“Para eso hacen esto”, justificó.
De acuerdo con Machuca, por circular en el carril confinado del Metrobús son 4 mil pesos de multa, pero además por no mostrar sus documentos, sacar al auto del depósito vehicular tendrá un costo similar. El oficial explicó que la conducta del automovilista es común.
“El que invadió y grosero que además niega las cosas, cuando tu lo viste que venía invadiendo el carril confinado y dice que no fue. Ese tipo de conductas es las que buscamos erradicar, a los conductores irresponsables es a los que buscamos quitar”, expresó.
Mientras La Silla Rota estaba presente el Inspector jefe de la Subsecretaría de Tránsito detuvo a otro conductor infractor, que quiso charolear al decir que era influyente. Cuando el oficial le dijo que en ese caso podía decírselo al medio de comunicación, su reacción fue recular y aceptar su error.
“Cuando son detenidos la mayor parte de ellos lo niegan, por eso es la foto e incluso las unidades de Metrobús también tienen cámara”.
El operativo de la SSC en el Metrobús
Fernando Arcos López, policía primero jefe departamental de la Dirección de Control de Tránsito, también participó en el operativo en el Metrobús. Explicó el protocolo aplicado a los conductores infractores:
“Los oficiales se identifican con su nombre y número de placa y le mencionan al conductor la infracción, en este caso el uso del carril confinado es sancionable de acuerdo con el artículo 11 fracción 10 del Reglamento de Tránsito”.
Tanto vehículos particulares como motos entran al carril confinado, estas últimas incluso lo hacen también en la ciclovía. En el momento que se les detiene y se les hace de conocimiento su infracción, si el conductor tiene placas de la Ciudad de México, únicamente se le elabora su infracción y se retira.
En caso de que sea de otra entidad, de acuerdo con el reglamento se tiene que retirar una garantía, puede ser la placa o la tarjeta de circulación para que se garantice el pago de la multa, continuó su explicación Arcos.
La multa es electrónica y se busca en la página de la SSC. Añadió que las sanciones son un tema de movilidad y los operativos previenen que los conductores invadan el carril y si lo hacen, posteriormente no lo repitan.
“Lamentablemente la detención momentánea causa tráfico y para que no obstaculicen, se les redirige a avenida Hidalgo, donde hay más policías”, agregó el jefe departamental de la Dirección de Control de Tránsito.
Ahí, sobre avenida Hidalgo se ven algunas patrullas y mas policías, así como algunos de los vehículos y sus conductores sorprendidos.
Reforma e Insurgentes, los más invadidos
El Inspector jefe de la Subsecretaría de Tránsito de la SSC, Omar Machuca dijo que los dispositivos son colocados en cuatro puntos, de lunes a viernes, y en total participan alrededor de 100 elementos.
En Reforma e Insurgentes se encuentran los carriles confinados del Metrobús más invadidos. Consideró que los operativos sí ayudan a disuadir a algunos conductores. Pero también ha habido algunos que le avientan el coche a los policías. A él mismo se le torció su tobillo cuando un conductor se lo arrojó y se escapó, concluyó.
MRV