El fiscal General de Justicia del Estado de México, José Luis Cervantes, ofreció una disculpa pública a las familias de Julia Sosa Conde, Nadia Muciño, Diana Velázquez Florencio (víctimas de feminicidio) y de Daniela Mabel Sánchez (víctima de desaparición), por las omisiones de la institución que desembocaron en la impunidad de los casos por años; pero ésta sólo fue aceptada por la hija de Julia Sosa.
“Que se escuche bien y con claridad, no atendimos lo suficiente a las víctimas ni a sus familias. Les dejamos solos. A partir de esta afirmación podemos lograr algo distinto, pero lamentablemente jamás podremos devolver la vida a Diana, a Julia, a Nadia Alejandra ni restituir a Daniela Mabel el tiempo perdido fuera de su núcleo familiar”, señaló el fiscal.
Este acto se logró a través de la intervención de colectivos e incluso Amnistía Internacional, quienes en repetidas ocasiones han recalcado la falla de los protocolos, el desinterés y desprecio con el que los ministerios públicos tratan a los familiares de víctimas.
Edith Olivares Ferreto, directora Ejecutiva de Amnistía Internacional México, recriminó que los casos de injusticia que hoy son retratados con los rostros de Diana, Nadia, Julia y Daniela; continúan sucediendo.
“No aceptamos esta disculpa, ¿dónde está la verdad?”, fue la respuesta de Axel y Laura Curiel, hijo y madre de Daniela Mabel, a la disculpa del fiscal tras relatar cómo sufrieron para poder activar la búsqueda de la joven mamá.
El fiscal general del Edomex señaló que cuentan con deficiencias presupuestarias y de personal; sin embargo, reconoció que eso no va de la mano de la falta de empatía y profesionalismo con el que fueron atendidas las familias de las víctimas.
“Están en su derecho de no aceptar estas disculpas, pero nosotros estamos en la obligación de ofrecerlas”.
Diana Velázquez
El 2 de julio de 2017, Diana de 24 años, salió de su casa en el municipio de Chimalhuacán a la 1:50 de la madrugada a realizar una llamada. Al ver que no regresaba y no contestaba sus llamadas, su madre, su padre y su hermana salieron a buscarla. Al día siguiente sus familiares intentaron poner una denuncia por desaparición, pero no la aceptaron por el mismo pretexto de las 72 horas, como en los casos anteriores.
Cuatro días después, su familia acudió al Centro de Justicia de Nezahualcóyotl y, entre cuerpos tirados en el piso, sin protección, con rastros de sangre encontraron el de Diana. Había sido ingresada como “hombre o identificado”, no tenía ropa y estaba en avanzado estado de descomposición. Las pruebas periciales de la Fiscalía confirmaron que había restos de semen en su cuerpo, indicando que fue agredida sexualmente antes de ser asesinada.
Daniela Sánchez
Daniela Sánchez Curiel tenía 20 años cuando desapareció el 11 de marzo de 2015 en Tlalnepantla, Estado de México. Hasta el día de hoy sigue desaparecida. Su familia está convencida de que fue víctima de feminicidio a manos de una anterior pareja suya, quien la maltrataba.
Nadia Muciño
Cuando Nadia fue asesinada sus hijos tenían 5, 4 y 2 años de edad. Fueron testigos de cómo su padre y su tío golpearon y mataron a su madre, luego armaron la escena para hacer creer que fue un suicidio. Fue hasta el 30 de marzo de 2005 cuando se emitió una orden de aprehensión en contra del cuñado de Nadia.
En 2009 se condenó, pero un año después, en 2010, fue absuelto porque los magistrados consideraron que los testimonios de los niños eran “fantasiosos”. En el año 2012, ocho años después del feminicidio, el esposo de Nadia fue detenido y, en 2017, condenado por homicidio.
Julia Sosa
Julia Sosa Conde de 43 años desapareció la mañana del 16 de octubre de 2018 en el municipio de Ozumba. Era comerciante y tenía cinco hijas y dos hijos. Desde que no supieron del paradero de su madre, las hijas de Julia trataron de denunciar su desaparición en la Policía Municipal de Nepantla. Sin embargo, las autoridades les dijeron que no podían efectuar una denuncia porque todavía no habían pasado 72 horas.
El 20 de julio fue hallada por sus hijas enterrada en el rancho donde trabajaba su pareja. El 24 de octubre, cerca del rancho donde encontraron a Julia, hallaron colgado de un árbol a su pareja. Anteriormente, él había manifestado amenazas de otra persona.
Las autoridades determinaron que el hombre había asesinado a Julia y después se ahorcó por remordimiento. No se examinaron más líneas de investigación.
MRV