El gobierno de la Ciudad de México dio a conocer el hallazgo de un cementerio del periodo virreinal temprano (1521-1620 d.C) por medio del proyecto Chapultepec, Naturaleza y Cultura, el cual es encabezado por la Secretaría de Cultura federal con la colaboración del gobierno capitalino. Esto ha permitido la recuperación de contextos históricos desconocidos.
A través de un comunicado, el gobierno encabezado por Claudia Sheinbaum informó que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) por medio de la Dirección de Salvamento Arqueológico (DSA) que ha acompañado cada intervención del proyecto y en las últimas semanas se ha concentrado en la zona conocida como “estacionamiento ecológico”, ahí se llevan a cabo obras para su integración con el Centro Cultural del Bosque en las inmediaciones de Campo Marte.
En este sentido, María de Lourdes López Camacho, coordinadora del salvamento arqueológico detalló que durante el seguimiento a las obras se realizó un pozo de sondeo de 2 por 2 metros, en el cual se detectaron restos óseos humanos a partir de 1.37 metros de profundidad, por lo que se consideró potencial el sur del área de investigación.
Te podría interesar
“Con la asistencia en campo de las arqueólogas Blanca Copto Gutiérrez y Alixbeth Daniela Aburto Pérez, se decidió extender la excavación al doble. En las últimas tres semanas, el equipo recuperó las osamentas –en diversos estados de conservación– de 21 individuos, en su mayoría adultos femeninos y masculinos, incluidos un par de infantes”, se lee en el comunicado.
Asimismo, rescató que las inhumaciones de realizaron dIrectamente desde el suelo en tres momentos diferentes durante el primer siglo luego de la caída de México – Tenochtitlán. Sin embargo, la mayoría de los entierros presentaron la misma orientación del oeste al este. En tanto, esto evoca a la creencia de la resurrección en la fe cristiana, su disposición hace pensar en dos tipos de población: una de origen indígena, probablemente mexica, y otra europea.
López Camacho explicó que en su mayoría los cuerpos de los individuos fueron colocados de forma extendida con los brazos cruzados sobre el pecho en la región pélvica, tal como lo marca el rito funerario católico, sin embargo, dos de los cuerpos fueron enterrados de forma flexionada y lateral. Asimismo, señaló que otro par de individuos fueron inhumados portando un sello y una navajilla de obsidiana verde, ambos prehispánicos.
“Proponemos que este enterramiento colectivo corresponde a un cementerio del virreinato temprano, porque muestra la transición de las costumbres funerarias prehispánicas a las implementadas con la llegada de los españoles y su sistema religioso”, manifiestó la especialista.
BV