Pese a salir de manera anticipada para llegar a tiempo a sus destinos, miles de usuarios sufrieron retrasos este lunes 9 de enero, entre las estaciones Indios Verdes y Tlatelolco de la Línea 3, donde el servicio del Metro fue suspendido por el choque de dos trenes ocurrido el 7 de enero entre Potrero y La Raza.
Los usuarios, muchos provenientes de Ecatepec, Estado de México, se toparon con el tráfico en su camino hacia Indios Verdes, así como con las largas filas que había para usar el Metrobús en el Cetram o para abordar los camiones de la Red de Transporte Público sobre avenida de los Insurgentes, ambos sistemas con rutas hacia Tlatelolco.
De acuerdo con datos del director del Metro, Guillermo Calderón, por la Línea 3 en día hábil se trasladan en promedio 500 mil personas, y entre el tramo comprendido entre Indios Verdes y Tlatelolco, hasta 100 mil.
ESTABA MUY MAL EL SERVICIO
Alberto Cruz es uno de esos miles de usuarios cotidianos de la Línea 3 del Metro en ese tramo. Entrevistado por La Silla Rota, antes de subir a unas de las 100 unidades de RTP desplegadas, compartió que iba procedente de Ecatepec. Salió a las 5 de la mañana con destino a Toluca y a las 7: 30am ya iba con una hora de retraso. Por el regreso a clases, este lunes observó más tráfico.
Al preguntarle si él ya sufría en la Línea 3 desde antes del choque, contestó que ya notaba que algo estaba mal ahí, debido a que los trenes hacían muchas paradas antes de las estaciones.
“Ya tenía fallas desde cuándo. Estaba muy mal el servicio”, criticó.
SIEMPRE LO MISMO
Liz fue otra de los miles de usuarios que este 9 de enero, en lugar de tomar el Metro, debió hacer una fila de cientos de personas para subirse a una unidad de la RTP, a una orilla del Cetram Indios Verdes, sobre Insurgentes norte.
Entrevistada por La Silla Rota mientras avanzaba, Liz calificó de “terrible” la situación. Para no llegar tarde a su destino, salió a las 5am desde Zumpango, en el Estado de México, donde ella vive. Eran las 7:40am y apenas estaba formada para tomar el RTP que la llevara a Centro Médico, lo que significaba que llevaba ya una hora de retraso.
“Siempre pasa lo mismo”, lamentó.
Afirmó que normalmente hace menos tiempo pero por el regreso a clases fue más tardado y todavía faltaba subir al autobús.
EN EL METROBÚS HABÍA FILAS ENORMES
Ismael Robles también fue otro de los usuarios del Metro que este lunes debió tomar en su lugar una unidad de RTP. En su caso salió de Santa Clara, Ecatepec, con media hora de anticipación. Formado en la larga fila que daba cuatro vueltas sobre sí misma, aseguró que iba bien de tiempo y prefirió irse por ese sistema de transporte en lugar del Metrobús, porque en este último había filas “enormes”.
Su destino era Potrero, una de las estaciones cercanas al choque de trenes, pero estaba confiado en que llegaría sin retraso. Cuestionado sobre el accidente, respondió que “lo del sábado estuvo feo”. Como otros usuarios, aseguró que también veía fallas en el funcionamiento del Metro.
Ese tramo, que normalmente se lleva 10 minutos por Metro, podía llegar a durar media hora en RTP, además que al llegar a Tlatelolco aún había que caminar a la estación, ingresar y tomar el tren.
Mariana es otra usuaria cotidiana de la Línea 3. Vive en Ecatepec. Debido a la falta parcial de servicio del Metro salió con media hora de anticipación. En su caso, abordó el Metrobús, donde también había largas filas y en donde afuera de sus instalaciones se veía gente correr para ganar algunos minutos. Ella también notó que desde hacía un mes, entre Indios Verdes y Coyoacán, su destino, los trenes marchaban más lento de lo habitual.
TROLEBÚS, SEMIVACÍO
La puesta en marcha del operativo con 100 unidades de la RTP, generó una larga fila de usuarios para abordarlos y aunque avanzaba rápido, por lo menos implicaba cinco minutos de estar formado.
El contraste se veía en avenida Ticomán, donde había unidades de Trolebús que daban apoyo para ir a La Raza o Doctor Pascua, en el Centro Histórico, pero ahí la fila no pasaba de 10 personas. Aunque había 150 personas de apoyo con chaleco guinda y el logo de la Secretaría de Movilidad, no informaban de esta alternativa, y quienes en su lugar lo hacían eran las amables policías desplegadas.
Tampoco era fácil llegar a la base del trolebús. Había que salir del Cetram, pasar por decenas de puestos ambulantes o atravesar un mercado, y de ahí salir a Ticomán. A la altura de la entrada del Cablebús que conecta Indios Verdes con Cuautepec, ahí se encontraba el transporte eléctrico.
LA TARDANZA VIAJA EN RTP
En Tlatelolco quienes llegaban de Indios Verdes por RTP sufrían más tardanza. Aunque las unidades sólo hacían parada en las estaciones del Metro, empleaban más tiempo porque se encontraban con semáforos y tráfico. Para llegar a Deportivo 18 de Marzo, la primera estación más cercana, la tardanza todavía era casi similar a la del Metro.
Pero conforme avanzaban las unidades, las previsiones de llegar con poco retraso se venían abajo. En La Raza el tráfico se agudizaba a la altura del paradero, tanto que no faltaban los automovilistas que abusivamente se metían en el carril exclusivo del Metrobús para ganar tiempo.
De ahí, para dirigirse a Tlatelolco las unidades de RTP recorrían una parte de Calzada Vallejo y doblaban por la calle Lerdo para salir por el Eje Vial 2 Norte, frente a la unidad habitacional Tlatelolco, y nuevamente doblaban a la derecha, donde los usuarios bajaban y a paso veloz se enfilaban al Metro Tlatelolco, pero antes debían atravesar el mencionado eje.
"ESTÁ CABRÓN"
En Tlatelolco un usuario de la RTP consideró que no fue tardado llegar desde Indios Verdes. Otro señor tuvo una opinión contraria.
“Está cabrón, el tráfico, todo, ya voy tarde, perdón”, dijo con un gesto de manos que denotaba desesperación antes de continuar su marcha apurada.
Los impactos de la falta de Metro entre Indios Verdes y Tlatelolco llegaban también a Eje Central, a donde los trolebuses de la ruta Central Camionera del Norte-Tasqueña iban atestados, lo cual no es algo común después de las 9:30am, según dijo una señora. También pasaban microbuses de una ruta concesionada o RTP que iban hacia Metro Hidalgo y que se convirtieron en una opción.
ULTIMO REPORTE
De acuerdo con la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, hasta este 9 de enero sumaban 106 lesionados y una persona fallecida por el choque de trenes en la Línea 3 del Metro ocurrido el 7 de enero.
De los heridos, 22 permanecían en hospitales: 17 en el San Angel Inn, dos en el Rubén Leñero, dos más en el 1 de Octubre y uno más en el Toxicológico, llevado ahí por tener también problemas de adicciones, explicó la funcionaria.
MRV