La Fiscalía General de Justicia (FGJ) determinó que hubo al menos otros dos actos dolosos para provocar “incidentes graves” en la operación del Metro durante en 2023, en las estaciones Polanco de la Línea 7 y Ermita de la Línea 12, que pudieron tener consecuencias como daños a las instalaciones, descarrilamiento o choque de trenes.
Esos casos son independientes a la quema y corte de cables que, según peritajes de la FGJ, fueron una de las dos causas del choque de trenes en el tramo Potrero-Indios Verdes de la Línea 3, el pasado 7 de enero.
Ulises Lara, vocero de la FGJ, informó que los peritajes y la investigación revelaron que el desacoplamiento de dos vagones en la estación Polanco, registrado el pasado 15 de enero, fue intencional.
“Las investigaciones y dictámenes periciales de la fiscalía han determinado que la posición y limpieza del tornillo izquierdo de sujeción, localizado en el enganche del carro N1537, indica que se realizaron maniobras con la intención de provocar un incidente grave en la operación del Metro.
“De acuerdo a la revisión de bitácoras, la revisión de los enganches semiautomáticos o acoplador Scharfenberg debe realizarse cada 6 meses, lo cual se cumplió, además de que la vida útil de las piezas y sus elementos era idónea de acuerdo a la temporalidad en la pieza marcada desde el último control de revisión”, puntualizó.
Sostuvo que se identificaron indicios en uno de los vagones que muestran maniobras recientes en el área donde se ubicaba la pieza, como la ausencia de “testigos” que muestran los puntos correctos de sujeción de las piezas, entre otras acciones, que no pueden ser realizadas con el tren en movimiento. En tanto que por lo que hace al vagón subsecuente no se localizaron evidencias de manipulación.
“La falla en el soporte se debió al sobre esfuerzo al que fue sometido debido a la manipulación y derivó en la separación de los vagones. En conclusión, la falla se originó por una manipulación dolosa de los elementos de sujeción del enganche semiautomático o acoplador Scharfenberg”.
En consecuencia, se abrió una carpeta de investigación contra quien resulte imputable, toda vez que por las acciones se presume la posible comisión del delito de daño doloso en vías de comunicación.
ESTACIÓN ERMITA L12
Lara recordó que el pasado 14 de enero, horas antes de la inauguración del tramo subterráneo Atlalilco – Mixcoac de la Línea 12, se detectó en la estación Ermita, que la caja de cambio de vías estaba golpeada y fuera de su lugar, por lo que se inició una investigación.
Explicó que el aparato de vía es el encargado de cambiar la dirección del tren para realizar maniobras de cambio de vía en inter estaciones y vías de enlace.
Sin embargo, sostuvo que “el daño o inhabilitación de dicho instrumento puede originar tres eventos: daños a las instalaciones, descarrilamiento y/o choque de trenes”.
El vocero de la FGJ afirmó que debido a las huellas de hundimiento registradas en la pieza del Mecanismo de Cambio de Vía, éstas fueron realizadas con intencionalidad mediante una herramienta de construcción, de mecánica o similar.
“Se trata de una acción dolosa ya que lo golpearon con el objetivo de inutilizar su funcionamiento y en consecuencia una operación de riesgo para el sistema de transporte de los usuarios de la Línea 12 en el tramo Atlalilco – Mixcoac”.
Comentó que hasta el momento se han integrado siete carpetas de investigación por hechos ocurridos en el Metro. Las tres relacionadas con las estaciones Potrero - La Raza; Ermita y Polanco; la cuarta por el hallazgo de un captor de pilotaje automático en la inter estación Hidalgo - Guerrero; la quinta por el descarrilamiento de uno de los carros motrices en el área de talleres El Rosario.
Una sexta por un corto circuito en la inter estación Barranca del Muerto - Mixcoac; y por último, una por corto circuito en la inter estación Terminal Aérea - Hangares.
MRV