Con lágrimas y sentada en los escalones de un local en la calle de Mesones, en el centro de la Ciudad de México, la señora Carmen Rivera señaló a La Silla Rota que sólo hay una de dos: o comen o compran los útiles escolares para sus hijos.
“Tres años atrás encontraba uno de todo, pero ahorita no, porque también hay mucho lugarcito que ya cerró porque se fueron a la quiebra estas vacaciones. Estamos comiendo muchos frijoles en la casa porque pues no podemos, o comemos o surtimos (los útiles) a los niños”, indicó la madre de familia.
La madre de familia compartió que llegaron desde Toluca alrededor de las 10:00 horas de la mañana; sin embargo, para las 12:00 horas no encontraban papel lustre y colores. Consideró que lo que piden las escuelas es muy caro, pues hay familias que van al día y apenas está comenzando a mejorar un poco la economía.
“El cuaderno antes estaba a 14 pesos hace dos años, pero ahorita ya está en 18 pesos. El gasto por niño en cuestión es de mil 500 pesos, las colegiaturas también han subido ya que varias escuelas están cobrando 800 o 500 pesos”, apuntó.
El regreso a clases del próximo lunes 29 de agosto se ha vuelto un reto con el cual los padres de familia han tenido que lidiar en gran medida por las condiciones económicas actuales en el país y la crisis generada por la pandemia a nivel mundial.
Es así que Mariana Fragoso, una de las madres que asisten al centro de la capital en busca de los útiles de sus hijos, describe su inconformidad ante lo pedido por las autoridades escolares ya que asegura que todo ha subido de manera exponencial.
“Subieron como tres veces los útiles de otros años, o sea, sí suben, pero hoy más. Hicimos una lista grande que casi equivale a 700 u 800 pesos sin sumarle mochila, porque con eso ya serían mil y tantos”, declaró.
Por otro lado, Fragoso compartió para La Silla Rota que el precio de estas listas también incrementa debido a que se han incluido nuevos artículos dentro de lo necesario a raíz de la pandemia.
Productos de higiene personal y limpieza de las áreas de los alumnos y alumnas, son uno de los factores que han hecho este regreso a clases más caro que en años anteriores.
“Es el gel, el antibacterial, el jabón y una franela, es lo más importante junto con los cubrebocas los cuales, por el momento, es uno por niño; sin embargo, ya después puede que pidan por paquete y ya es más caro”, señaló la señora Fragoso.
CRISIS PEGA TAMBIÉN A COMERCIANTES
Eduardo Salazar, gerente de una papelería del centro de la capital, señaló que a diferencia de otros años, los precios de las cosas también han aumentado para ellos como comerciantes. Indicó que la razón principal de esta alza en los precios se debe al desabasto que ha habido a causa de la pandemia.
“El tema de la pandemia vino a hacer un desabasto a nivel a nivel mundial, la mayoría de los productos son importados de China entonces al ser ahí el el auge de la pandemia definitivamente hubo un desabasto increíble esto hizo que se incrementarán materias primas que se incrementarán los costos de todas las producciones y obviamente, pues es una escalera que nos viene a afectar directamente a todos nosotros”, indicó Eduardo.
Día con día, el local en donde labora abre desde las primeras horas de la mañana y es a partir de las 12:00 horas del día que comienza a haber una mayor afluencia de personas en el sitio.
Afirmó que el incremento del precio de los productos se elevó un aproximado de 60% o 70% en comparación con los costos normales o anteriores a la crisis sanitaria, además de que indicó que el gasto por alumno gira en torno a los 500 o 600 pesos.
“Creo que este año vamos bien, ya que el regreso a clases es completo: universidades, preparatorias, primarias y kínder. El ciclo 2020-2021 estuvo muy limitado; sin embargo, gracias a la apertura de establecimientos y escuelas, considero que el flujo de gente es bastante”, indicó Eduardo.
Por otro lado, Viviana, una comerciante de la calle de Ramón Corona, en el centro capitalino, indicó también a La Silla Rota que los precios han incrementado indudablemente, ejemplo de esto es el papel cristal cuyo precio en años pasados era de 75 pesos y ahora cuesta 150 pesos.
Asimismo, la vendedora puntualizó que existen artículos que las personas se llevan más que otros como los cuadernos, plumones, fomi diamantado, hojas y colores.
De igual forma, indicó que en años pasados en la misma fecha había un poco más de gente que asistía al lugar para surtir sus listas de útiles, y agregó que por niño se están realizando compras de 700 u 800 pesos.
“En años pasados se llevaban por empaque, ahora se llevan por piezas”, dijo la joven comerciante quien aseguró que dicho comercio familiar cuenta con más de 22 años de antigüedad.
Es así que queda demostrado que este regreso a clases no sólo representa un reto económico para los compradores, sino también para los comerciantes y el público en general.
MRV