LO MÁS VIRAL

La historia de los perritos que no se separan de la tumba de sus dueños en Tulancingo

Ambos canes llegaron al camposanto acompañando el servicio funerario de sus amigos humanos y al finalizar no quisieron retirarse

El primer lomito en llegar al cementerio de Tulancingo fue Negro a mediados de 2012 y años después siguió Nena.Créditos: Imagen ilustrativa / Collage
Escrito en HIDALGO el

TULANCINGO.- Las muestras de lealtad y cariño que un perro puede crear con su dueño humano las sigue demostrando incluso hasta la muerte, como está el famoso caso de Hachiko en Japón, un lomito akita que esperó nueve años hasta el regreso de su amigo quien falleció por enfermedad. En Hidalgo está el caso de Negro y Nena, quienes se volvieron virales, ya que permanecieron en un cementerio de Tulancingo junto a los cuerpos de sus dueños.

De acuerdo con la cronista del municipio Tulancingo Lorenia Lira, explicó que ambos peluditos llegaron al camposanto acompañando el servicio funerario de sus amigos humanos y al finalizar estos no quisieron retirarse del lugar e incluso sufrieron una enorme tristeza al grado de ya no querer comer, pero fueron ayudados.

Hachiko fue un lomito en Japón que esperó el regreso de su amigo sin saber que falleció por enfermedad / Imagen ilustrativa: Hola!

El primero en llegar al llamado camposanto fue Negro mediados de 2012, aunque ese no era su nombre real, pero el personal del espacio de descanso final comenzó a llamarlo así al ver que nunca se iba ni se separaba de la lápida de su deño e incluso no comía, hasta que semanas después aceptó poco a poco los alimentos que le ofrecían.

Pese a una leve recuperación, nunca quiso separarse de la tumba y con el paso de los meses se ganó el aprecio de todos, en especial del director del cementerio, que, conmovido por la lealtad del lomito, decidió adoptarlo al finalizar su administración y se lo llevó a su casa al aprovechar el vínculo que crearon.

El primero en llegar al llamado camposanto fue Negro a mediados de 2012 / Imagen ilustrativa: web

Nena aún vigila la tumba de su dueño

Otro can que igual custodia la tumba de quien fuera su amigo humano es Nena, de quien Lorenia Lira asentó que aún sigue en el panteón de la llamada ciudad de los satélites localizado contiguo a la zona Centro, mismo que igual habría llegado en el cortejo fúnebre en la actual administración del espacio.

Otro can que igual custodia la tumba de quien fuera su amigo humano es Nena / Crédito: Facebook Lorenia Lira

Pero luego de que familiares de la persona fallecida dieron el último adiós, la perrita que es blanca con manchas cafés no lo pudo hacer y por ello se quedó acompañando a su dueño durante varios días hasta que fue adoptada por los trabajadores del cementerio, quienes la cuidan y le dan de comer y a cambio ella los acompaña a sus labores sin salir del panteón.

¿De dónde viene la leyenda de los lomitos y el río del Mictlán?

La leyenda de que si se cuidó bien de un perrito este ayudará a las personas a cruzar el río del Mictlán montado en su lomo surgió de la cosmogonía nahua y maya, misma que añadió que dichos lomitos son capaces de ver las almas cuando se separan del cuerpo al morir, por lo que es un buen mensaje para el cuidado animal.

Hay una leyenda de que si se cuidó bien de un perrito este ayudará a cruzar el río del Mictlán / Crédito: Diario AS

 

cem