Pachuca.- En el periodo de 10 años, el servicio de agua potable que presta la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (CAASIM) ha sufrido incrementos, de tal forma que de 60 pesos que se pagaban en 2013 por el consumo mínimo de ocho metros cúbicos, actualmente, el pago por el mismo consumo es de 136 pesos con 71 centavos, lo que representa un incremento del 128 por ciento, más del doble de lo que gastaba una familia en 2013. En pesos, el aumento fue de 76.71.
En los últimos meses, habitantes de diversos municipios del estado han salido a manifestarse por el deficiente servicio de agua potable que reciben, ahora muy marcados los tandeos, la escasez y la falta de fuerza en la tubería.
En febrero y marzo, suman por lo menos seis protestas por la falta de agua en la capital del estado, vecinos de Pitahayas, Haciendas de Hidalgo, El Palmar, Piracantos, San Antonio el Desmonte, entre otros, han salido a las calles para manifestarse por la carencia, y al tiempo acusan que el recibo llega muy puntual “y cuidado y no lo pagues” porque te la cortan y para reconectarla cobran 800 pesos.
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De acuerdo con un registro realizado por La Silla Rota, el consumo de agua potable incrementa año con año, pero fue en 2014, 2017 y 2021, cuando se realizaron los aumentos más considerables al servicio de agua y alcantarillado, por parte de la Caasim.
De 2013 a 2014 el servicio de agua potable aumentó casi 25 pesos, de 60 pesos que se pagaban, la LXII Legislatura presidida por Ernesto Gil Elorduy avaló un cobro de 84.71 pesos (24.71 pesos más).
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Lo mismo en 2017, de 92 pesos que costaba el consumo mínimo en 2016, pasó a 109 pesos con 86 centavos, lo que arroja una diferencia de 17 pesos, dicho aumento fue avalado por la LXIII Legislatura.
En 2021, el incremento al servicio del agua fue de los más altos, esta vez fue de nueve pesos con 34 centavos. De 120 pesos que se pagaban el costo del consumo mínimo pasó a 129 pesos. Aumento aprobado por la LXIV Legislatura.
Los municipios que atiende Cassim, son: Pachuca, Mineral de la Reforma, El Arenal, Epazoyucan, Mineral del Monte, San Agustín Tlaxiaca, Tlanalapa, Zempoala, Zapotlán, Villa de Tezontepec, Tolcayuca, Singuilucan, Mineral del Chico y Tepeapulco, de acuerdo con sus propios datos atiende un padrón de 254 mil 752 usuarios.
El recibo de agua incluye el pago del servicio, un cobro por el medidor, saneamiento, alcantarillado y un IVA, así ha pasado de 60 pesos en 2013; 84,71 pesos en 2014; 92 pesos en 2015; 92.80 pesos en 2016; 109.86 pesos en 2017; 115 pesos en 2018; 117 pesos con 89 centavos en 2019; 129 pesos con 63 centavos en 2021; 132 pesos con 46 centavos en 2022, hasta llegar a 136 pesos con 71 centavos en 2023.
Andrés dejó de pagar agua al inicio de la pandemia
El señor Andrés dejó de pagar agua desde el año 2020, en realidad nadie habita el domicilio, pero se paga el servicio mínimo; sin embargo, en casi tres años acumuló una deuda de 17 mil 700 pesos.
Evidentemente molesto, don Andrés firmó un convenio de pago con la Caasim para que le restablecieran el servicio, pues aunque pocas veces viene a Pachuca, el agua es indispensable en cada visita.
Don Andrés se queja porque asegura que el cobro de agua no va acorde con el servicio que recibe, incluso ha tenido que contratar pipas que le cuestan hasta mil 500 pesos, “es uno de los estados más caros y deficientes en servicio, no entiendo por qué, si la ciudad no da para eso, es dónde los sueldos y salarios están más pobres”.
Aquí cabe señalar que, de acuerdo a la tabla elaborada por La Silla Rota Hidalgo, hasta antes de 2020, el salario mínimo era menor al costo del servicio mínimo del consumo de agua, y a partir de 2020 el salario mínimo superó el precio pagado en cada recibo por el consumo de ocho metros cúbicos.
Don Andrés menciona que dejó de pagar su agua porque atravesó una crisis económica durante la pandemia, pues a pesar que se dedica al negocio de paquetería, hubo problemas de salud que fueron prioritarios y que por atenderlos, descuidó el pago de algunos servicios.
“En tiempo de pandemia cerraron las oficinas, y no pagué en esa temporada, luego hubo problemas de salud en la familia y menos pagué, por atender la salud de la familia, pero aquí no se la perdonan a uno. Ahorita les dije - es buen negocio -, yo debía mil pesos y tuve que pagar 17 mil pesos”, expresó.
El hombre asegura que ha hecho comparativos con otras entidades, e Hidalgo es de los más caros en servicios, a pesar de que es deficiente, “tengo una casa en el Estado de México y otra en Querétaro. En el Estado es una cuota anual y lo que consumas, y aquí no, aquí te cobran y te cobran, y si no pagas te cobran intereses sobre intereses. Pagas o no hay servicio. Yo trabajo para una empresa de mensajería y paquetería, es uno de los estados más pésimos y más caros, no los vale, pero o pagamos o no tenemos el servicio. Desgraciadamente no nos tocó ser políticos y no nos tocó disfrutar de los privilegios que ellos gozan”, expresó.
De un plumazo eliminan usuarios
En 2019, en la minuta emitida de la sesión realizada el 22 de febrero, se hablaba de una población objetivo estimada de 832 mil 500 beneficiarios, con base en el padrón de usuarios registrados en el sistema comercial de Caasim; en este 2023, en el portal del organismo operador del agua se habla de 254 mil usuarios registrados, ¿dónde se fueron el otro casi medio millón? No se sabe, porque los municipios donde presta servicio siguen siendo los mismos, salvo Omitlán que ya no aparece en el listado oficial.
sjl