Pachuca.— Como cada Día de Muertos, año los días 1, 2 y 3 de noviembre en la Bella Airosa cientos de devotos de la Santa Muerte se congregaron en el Mercado Sonorita para celebrar a la Niña Blanca y al Angelito Negro, con una procesión por el primer cuadro de la ciudad para agradecer los favores recibidos durante el año.
La mañana de este jueves se llevó a cabo la procesión con un contingente que partió de la Catedral de la Santa Muerte, que se ubica en la colonia Nuevo Hidalgo, para llegar al Reloj Monumental de Pachuca, donde imágenes, bustos y música en vivo fueron los protagonistas en el recorrido que se celebra desde hace 20 años en la capital hidalguense.
El Obispo Negro, Oscar Pelcastre Almanza, indicó que es un festejo grande en todo el país dedicado a la Niña Blanca, fe que incrementa entre la gente año con año. “Podemos reafirmar la devoción de los fieles a través de la creación de más capillas dedicadas a la Santa Muerte y en las donaciones que recibimos en la catedral”.
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Durante los días de celebración habrá rituales, limpias, purificaciones, preparación de imágenes, además de un convivio con fieles de Hidalgo y que llegan desde Canadá, Estados Unidos, Cuba y otros estados del país, con comida y música en vivo, en las instalaciones del Mercado Sonorita.
Niños, jóvenes y adultos participaron en la procesión y a modo de pago de manda algunos devotos y seguidores de la Santísima Muerte y el también nombrado Angelito Negro efectuaron el recorrido descalzos. “Cada 2 de noviembre damos gracias por todos los favores recibidos en el año. En estas fechas dedicamos un altar y ofrecemos pan, café y dulces a la Santa Muerte”, compartió el creyente José Paz González, quien viaja desde Atotonilco el Grande.
Una vez establecidos en la Plaza Independencia, Oscar Pelcastre, El Perro, mencionó que en esta celebración se unen dos religiones en un ambiente de respeto. “La gente llega por su fe. Cuando inicié me acompañaron 10 personas en la capilla de la Miguel Hidalgo, de ahí en adelante la gente comenzó a llegar y hoy me siento muy orgulloso de ver a tanta gente participar”.
Recordó que la Catedral de la Santa Muerte se construyó cuando mandaron quemar el Santuario, “un expresidente dijo que iba a acabar con los brujos e iba a cerrar el Mercado Sonorita, lo que sucedió después es que lejos de hacer un daño provocaron la unión de las personas, ahora llegan creyentes de todas las religiones al Mercado Sonorita, todos son bienvenidos”.
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