Pachuca.— El pasado sábado 8 de marzo, en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la ciudad de Pachuca fue escenario de una multitudinaria manifestación en la que miles de mujeres salieron a las calles para exigir justicia, igualdad y el cese de la violencia de género; la jornada concluyó con disturbios y agresiones.
Durante la movilización en la capital hidalguense “Marchamos juntas”, en la que participaron alrededor de 6 mil mujeres, convocadas por colectivas feministas de Hidalgo, se reportaron, de forma oficial por parte del Gabinete de Seguridad Pública, 20 casos de agresión a manifestantes, 5 detenciones y daños a inmuebles públicos.
Rocío Espinosa Martínez, espectadora en el círculo de sanación durante la protesta, denunció haber sido agredida por elementos de Seguridad Pública cuando intentaba evitar la retención de un grupo de adolescentes que realizaban la quema de carteles en Plaza Juárez.
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“Nunca había participado en una manifestación, esta ocasión fui acompañando a mi amiga porque supo que habían detenido a algunas adolescentes, llegamos pasadas las 5:00 de la tarde para apoyar en la liberación de tres mujeres, entre ellas una menor, para entonces ya se encontraba un grupo pequeño de no más de 300 personas en toda la plaza. La exigencia era que a las jóvenes las devolvieran de en el mismo lugar de donde se las habían llevado y el no respetar ese sentimiento fue lo que incendió a las manifestantes”.
Detalló que nuevamente se formaron el círculo de sanación, espacios para compartir testimonios de violencia y brindar apoyo mutuo, y se avivó la fogata para la quema de carteles, momento en el que un grupo de policías las rodeó para detenerlas y donde recibió un golpe en el rostro.
“Estaba escuchando las historias cuando rodearon al grupo y veo que agarran y se llevan a una entre siete policías, es ahí donde empieza ese jaloneo y yo veo un brazo estirado de uno de los policías, mi primera reacción fue quitarme de una situación de riesgo, desafortunadamente al ver la disparidad de poder entre oficiales y adolescentes que únicamente estaban armadas con carteles, intenté quitarlos, pero siento como me jalan del cuello de la playera, me hacen hacia atrás y en eso un golpe en el ojo”.
De forma inmediata acudió a levantar la denuncia ante la Procuraduría y la Comisión de Derechos Humanos en Hidalgo. De acuerdo con el informe médico, por el golpe que recibió Rocío tiene desviado el tabique, una fisura en mandíbula y hematomas.
“Pienso que pudo haber sido mucho peor ¿si hubiera sido alguna de las niñas a quienes arrestaron?, por ejemplo, ellas se veían delgaditas y pequeñas de estatura. Para mí es muy importante que de alguna manera la ciudadanía se haga consciente de esta situación, porque a cualquiera nos puede pasar ¿por qué? porque el gobierno está incómodo con que se le hagan cuestionamientos, con que se manifiesten los deseos de un cambio”.
Posicionamiento oficial
Durante el informe del Gabinete de Seguridad Pública de Hidalgo se aseguró que no se agredió a manifestantes, asimismo, se informó que hubo hombres infiltrados en la protesta; se tuvo como saldo 20 mujeres policías lesionadas, algunas atacadas con gasolina; tres personas detenidas durante la marcha y dos más al siguiente día, así como daños materiales a monumentos y estaciones del Tuzobús.
“En redes sociales se ha mencionado que una manifestante sufrió una lesión en la cara, pero fue atendida por nuestros policías. A las 18:00 horas se observa a una persona con una blusa color beige, pantalón gris y calzado claro (…), se ve que la persona se encuentra en el centro participando en la trifulca, en las imágenes se ve a otra persona manoteando y en medio de compañeras policías, pero en el video no se observa ninguna agresión de policías. Una tercera fémina que portaba una pañoleta verde levanta la mano con un objeto que creemos que es una piedra, la arroja y se aprecia cómo golpea a la persona en el rostro, posteriormente ya es atendida por una compañera policía y por la Comisión de Derechos Humanos”, explicó Salvador Cruz Neri, titular de Seguridad Pública del Estado de Hidalgo.
Guillermo Olivares, secretario de Gobierno, enfatizó que posiblemente personas de otros estados incitaron a la violencia y aseguró que no hubo respuesta por parte de la autoridad, únicamente resistió y contuvo, nunca agredió, se avocó a salvaguardar la integridad de las participantes.
“Nosotros las fuimos cuidando de diversas formas en el trayecto de la marcha, proveyéndolas de agua, cítricos, teniendo a la mano ambulancias, personal médico, tomando signos vitales que por el calor lo requirieron, ese fue el propósito de nosotros, cuidarlas y apoyarles, y hay que dejar en claro, la gran mayoría de participantes en la marcha mostraron una actitud pacífica, respetuosa, unas cuantas y unos cuantos provocaron la agresión y violencia, por eso surgió la necesidad de reforzar el orden público”.
Espinosa Martínez hizo un llamado a cuestionar la violencia y los métodos de blindaje de la Seguridad Pública recordando que es un derecho legítimo manifestarse de forma segura.
“Ninguna persona se manifiesta ni sale a protestar para que la agredan ¿por qué los policías se burlaban de las exigencias, retaron y reprimieron a las mujeres? ¿de verdad es tan grave, que un grupo de jóvenes se junten en una plaza pública para hablar de sus experiencias como violentadas? Esta ocasión fui yo, pero pudo ser alguien más con consecuencias mayores. La sociedad debe entender que la manifestación es un derecho y debemos alzar la voz y hacer eco por una sociedad mejor”.
sjl