La muerte de un hombre por causas hasta el momento desconocidas causó consternación entre habitantes de un municipio del estado de Hidalgo, quienes añadieron lo que describieron como un detalle conmovedor del suceso y fue que un perro, al parecer propiedad del ahora fallecido, no se apartó del cuerpo.
De acuerdo con la narrativa preliminar, una mujer que transitaba por la carretera estatal Acatlán-Huasca, a la altura de la localidad Totoapa cerca de la hacienda del mismo nombre, fue quien notó la presencia de una persona tirada en el suelo, por lo que al temer por la integridad de la misma emitió una llamada de emergencia.
A la línea universal 911 explicó su hallazgo y urgió la presencia de paramédicos y autoridades correspondientes para hacerse cargo del hecho, ante lo cual fueron despachados agentes en campo de la Policía municipal en coordinación con personal de Protección Civil (PC) quienes llegaron hasta el sitio asentado.
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En primer lugar, las autoridades confirmaron la presencia de una persona y se trató de un hombre de edad adulta quien yacía en el suelo, por lo que se avocaron a atenderlo con técnicas de reanimación, pero los esfuerzos fueron en vano, pues se declaró que ya había una muerte irreversible y esta al parecer tenía varias horas de acontecida.
Perro no se separó del cuerpo de su dueño; esta pudo ser la causa de muerte
Al no poder hacer más de manera médica, se procedió a analizar las condiciones externas del hombre y se asentó que la posible causa de muerte pudo haber sido una contusión que sufrió, ya que desde su cabeza presentaba líquido hemático, es decir, sangre, que es evidencia de un fuerte golpe que le pudo haber arrebatado la vida.
Sin embargo, la manera en la que ocurrió el impacto contra el asfalto de la carretera Acatlán-Huasca se desconoce, además de que se aseveró que fue una suposición preliminar, por lo que para tener datos certeros se pidió la presencia de peritos especializados de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH).
Dicho personal se encargó de recabar las pruebas y testimonios a su alcance, además de custodiar los restos humanos del hombre que fueron llevados hasta una agencia del Servicio Médico Forense (Semefo) donde serán estudiados mediante la técnica de autopista para saber la verdadera causa de fallecimiento.
En ese sentido, se aseveró que al lado del cuerpo permaneció en todo momento un perro de raza criolla color café, quien en un momento dado decidió recostarse y mirar el cadáver de quien fuera su dueño e incluso no se separó de él durante los peritajes dichos líneas arriba, lo que conmovió a testigos y autoridades por la fidelidad animal.
cem