Tulancingo.— El próximo 2 de septiembre comparecerán en audiencia el expresidente municipal de Tulancingo, Fernando Pérez Rodríguez, así como titulares de Tesorería, Obras Públicas y la constructora del Parque Aventura, indicó el contralor Salvador González Cruz.
Explicó que el proceso continúa y los involucrados deberán atender las observaciones emitidas por la Auditoría Superior del Estado de Hidalgo en los temas de Parque Aventura, la entrega de bonos y el terreno de la feria.
“Los procesos siguen y no por término de una administración esto va a terminar. Ya se convocó al exalcalde Fernando Pérez (recibió la notificación hace dos semanas), y a los diferentes actores: de la constructora, el tesorero y obras públicas, todas las partes tienen que exponer sus recursos con las autoridades investigadoras, sustanciadora y resolutoria del municipio”.
Será el 2 de septiembre cuando se determine como falta grave o no grave la no operación de Parque Aventura, así como nuevas observaciones; las contrapartes podrán hacer uso de recursos legales, evidencias y documentos, de ser requeridos, y el proceso que podrá continuar con seguimiento del estado y la nueva administración municipal.
Parque Aventura Tulancingo
En enero del 2020 fue presentado el proyecto que buscaba integrar la parte alta del centro de Tulancingo, reactivar la economía local, descentralizar actividades culturales con un componente turístico en el Cerro de Tezontle.
La inversión para el desarrollo del parque fue de 6 millones 687 mil 601.26 de pesos que, de acuerdo con la administración de Fernando Pérez Rodríguez, sería recurso propio producto gracias a la labor responsable de la Secretaría de Tesorería y Administración.
Se visualizó que la primera etapa del Parque entraría en operación el primer semestre del 2020 y se integraría por un circuito de 14 retos aéreos, además la reconfiguración del Zoológico, con una granja didáctica y otras intervenciones para la movilidad, luminaria, señalética y servicios urbanos.
El centro de diversiones sería administrado por el gobierno local y se proyectaba una afluencia anual de 40 mil visitantes con una importante derrama económica que permitiría el mantenimiento y gastos corrientes del atractivo.
Este 2024 se cumplieron cuatro años de la colocación de la primera piedra, y fue declarada inviable por la Secretaría de Contraloría del Estado al no entrar en funciones, por lo que el ayuntamiento deberá devolver los más de 6 millones de pesos correspondientes a recursos propios.
sjl