Pachuca.— En Hidalgo más de 600 mil mujeres son emprendedoras, principalmente en regiones metropolitanas y zonas urbanas, en comunidades rurales los emprendimientos son colectivos centrados en artesanías, de acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Económico de Hidalgo (Sedeco).
En el marco de la Semana Mujer Mipyme Hidalgo 2024, organizada por la Sedeco, el titular de la dependencia Carlos Henkel Escorza indicó que el crecimiento de este sector productivo ha incrementado en los dos últimos años en el estado, por lo que desde la Secretaría se da especial énfasis al apoyo y vinculación de mujeres empresarias y emprendedoras.
“El incremento es notorio año con año, en particular en los dos últimos años y esto se refiere a dos temas importantes, el primero es que la mujer ha encontrado su verdadero valor y ha perdido el miedo a participar en las actividades económicas, así como por la obligación misma de ser jefas de familia”.
Hidalgo en cifras
De acuerdo con la Secretaría la población de mujeres económicamente activas es del 42 por ciento, de ellas 636 mil 578 son emprendedoras. El 56.6 por ciento son propietarias de pequeños negocios, el 28 por ciento son mujeres trabajadoras por cuenta propia y el 30 por ciento de las micro, pequeñas y medianas empresas formales y registradas son lideradas por mujeres.
Henkel Escorza señaló que la mujer que decide emprender no sólo genera economía propia, sino que se vuelve creadora de empleo con una estructura solidaria que impulsa a más mujeres en la vinculación dentro del sector comercial y de negocios, creando nuevas redes y estrategias de proveeduría, incluso, en actividades poco recurrentes para la mujer.
“La mujer se ha diversificado, hemos tenido encuentros en actividades que no eran tan recurrentes para las mujeres como el de la construcción, ahora ya hay una presencia importante. De la misma manera identificamos que la región metropolitana y zonas urbanas son los principales lugares donde mujeres emprenden, especialmente por las facilidades de acceso”.
Asimismo, consideró que el emprendimiento no es exclusivo de ciudades o zonas urbanas, ya que en regiones alejadas donde los hombres se dedican a actividades primarias como el campo, las mujeres buscan el emprendimiento colectivo, específicamente en la elaboración y venta de artesanías.
“Algo que ha potencializó esto fue la pandemia, donde no se tenía la posibilidad de salir de casa muchas veces, y de forma organizada las mujeres empezaron a gestar redes de negocios que al tiempo se consolidaron y siguen trabajando, en muchos casos se han acercado con nosotros para consolidar algunas cooperativas y comenzar emprendimiento colectivo de manera adecuada y formal”.
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