Purísima del Rincón.- Tal y como hace 150 años, La Judea cumplió su cita con la tradición y ante cerca de 36 mil personas, la tarde de este Viernes Santo, Judas Iscariote fue ahorcado en el Jardín Principal de esta ciudad, por haber traicionado a Jesucristo al venderlo a los judíos por 30 monedas de plata.
Esta tradición resulta ser de una manera especial, pues diferente a todas las celebraciones de Semana Santa, el apóstol traidor es el protagonista de esta representación, aunque no para darle un reconocimiento, sino para castigarlo por su traición.
Lejos ya de la amenaza de una pandemia que parecía que nunca iba a controlarse, por decirlo de alguna manera, ya que se siguen dando casos, aunque muy pocos, los fieles católicos de Purísima fueron anfitriones de miles de visitantes de municipios y estados vecinos que acudieron para ser partícipes de La Judea purisimense.
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Aunque esta representación empieza desde el miércoles, la culminación se vivió primero durante la mañana de este día, persiguiendo a un Judas escurridizo por las calles de la ciudad, hasta llegar al Jardín Principal, donde, cerca de las 5 de la tarde, pudo ser finalmente aprehendido y colgado, como una forma de castigarlo y de “mandarlo al infierno” por su traición.
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Tras bajar de bajarlo de la horca, el cuerpo de Judas fue llevado a la Casa de la Cultura, donde los diablos se llevaron también a los fariseos y romanos al infierno, por haber sido partícipes de la muerte de Jesús.
Las máscaras
Para la representación se utilizaron alrededor de 500 máscaras, elaboradas por artesanos purisimenses, donde destaca la de los personajes principales; Judas Triste, Judas Negro, El Ranchero, La Oriental, La Risueña, Malco, El Tiempo, El Diablo Mayor y El Diablo Menor.
Estas máscaras son obras de arte, elaboradas con madera de árbol de colorín, y pueden costar hasta 3 mil pesos.
Los participantes utilizan también túnicas y turbantes de vistosos colores. A la chusma de judíos se suma un contingente de soldados romanos, precedidos de un grupo de músicos quienes acompañan con música en vivo esta representación, utilizando el tambor, la chirimía y los clarines.
El Miércoles Santo fue la primera salida de La Judea por las calles de la ciudad, el jueves y ya aparece Judas con una máscara negra e hinchada, con un rostro desfigurado.
El Viernes Santo, en el Jardín Principal y como parte de la La Judea se desarrollaron por la mañana representaciones de "El Prendimiento", "Las Tres caídas", "Las Siete Palabras" y "El Santo Entierro", en donde los personajes principales y santos como Jesucristo, la Virgen María, el apóstol San Juan y la Magdalena son representados por imágenes religiosas talladas en madera.
Derrama económica
Por su parte, el alcalde de Purísima, Roberto García Urbano, señaló que durante los eventos de Semana Santa se espera en esta ciudad una derrama económica de alrededor de 20 millones de pesos.
Dijo en entrevista que el año pasado se tuvo la presencia de 36,000 personas y “esperamos hoy llegar a los 37,000, aunque ya no le cabe más a la plaza”. Posiblemente se llegó a esa nueva cifra, ya que no cabía un alma más en la plaza principal.
Sobre la Judea, manifestó: “Nos ha dado identidad, nos ha unido como comunidad y nos llena de orgullo… Hoy tenemos visitantes de la Ciudad de México, Querétaro, Michoacán y Jalisco, y de ciudades vecinas como San Francisco del Rincón, León y Silao, y de muchas otras partes, incluyendo algunos migrantes de California, Texas y Nevada”.
Agregó que muchos migrantes que están en Estados Unidos siguen esta transmisión por internet y propiamente viven y sienten desde donde se encuentran la tradición de su pueblo natal.