León.- Mona y Geros volvieron a ser víctimas de la delincuencia en su casa en el fraccionamiento El Dorado, donde les robaron dos millones de pesos en efectivo, según denunciaron en redes sociales. Apenas el pasado mes de julio habían informado, también mediante redes sociales, que ladrones habían entrado a su vivienda para llevarse dinero en efectivo, alhajas, aparatos electrónicos y hasta los tenis de Geros. Sin embargo, ese robo previo no igualó en monto a los dos millones de pesos en efectivo.
La pareja de influencerse compartió un video en vivo de 55 minutos, contando con gran impotencia el coraje que sentían por la pérdida. “Nos pasó lo peor de nuestras vidas, a nadie se lo deseamos, ni a nuestro peor enemigo”, dijo Geros, visiblemente consternado.
El fraccionamiento El Dorado, al oriente de la ciudad, tiene filtros de vigilancia en la entrada y la salida, y los guardias son tan minuciosos que en las entradas a la colonia se forman largas filas.
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En el robo de julio la pareja había dicho que sospechaba de los guardias, quienes en aquella ocasión se negaban a mostrar los videos de vigilancia. Esta vez, la situación se ha repetido, según dijo Geros.
Hasta el llanto
En la transmisión en vivo, Mona dijo que salía de cuadro pues estaba a punto de romper en llanto. Dijo que se salía del foco de la cámara porque no quería que la vieran mal sus seguidores.
“El sábado fue el peor día de nuestras vidas, es lo peor que nos ha pasado. Yo quiero que me vean bien, que le echo ganas, pero hoy es casi imposible, siempre trato de dar mi mejor cara”, señaló en YouTube.
Habían dejado sola su casa para ir a la de su hermana, donde habría una fiesta amenizada por el famoso sonido “Cremas”. Mona llevaba solamente su bolsa con los 4,000 pesos que le pagaría al dueño del sonido.
Cuando volvieron a El Dorado, encontraron abierta la puerta de la cochera. Lo primero que pensaron (y desearon) fue que sus perros se habrían salido, pero dentro de la vivienda encontraron un desorden, incluso muebles rotos, los sillones cortados con navajas, en una agresión e invasión de su espacio que iba más allá del simple robo.
“Rompieron nuestros muebles, se llevaron todo el dinero que teníamos, nos dejaron en ceros, destrozaron las pantallas, los sillones, abrieron y sacaron todo lo que encontraron”.
Fueron robados una laptop, tres celulares, el DVR, ropa, abrieron su caja fuerte, cadenas de plata y dinero efectivo.
Se llevaron las ventas de su tienda que tiene solo unos días de inaugurada y hasta el monitor de las grabaciones de las cámaras de seguridad.
Los amantes de lo ajeno se brincaron por el patio de atrás, golpearon a sus perros, rompieron la sala y estrellaron las pantallas. No entraron por la puerta principal para evitar el códugo de seguridad.
“Resulta que nadie vio, la gente es muy chismosa con nosotros y ahora no vieron nada”, se quejó Mona.
Desde que llegaron a ese fraccionamiento exclusivo, Mona y Geros no fueron bien recibidos y los han acosado constantemente por sus perros, el color de sus carros y hasta su aspecto físico.
Ahora, sospechan de los encargados de la vigilancia privada de la colonia.
La pareja no informó si el hecho sería denunciado ante la Fiscalía General de Guanajuato.
cv