OPINIÓN

Negligencia Criminal

Queda plasmado y evidenciado una vez más, que la ley y el estado de derecho no importa ni interesa a AMLO, a su gobierno, a su movimiento de destrucción y mucho menos a su partido Morena, donde la anarquía y el desorden institucional, es una política pública que aplican como estilo de vida

Créditos: Especial
Escrito en GUANAJUATO el

La negligencia es la omisión de la atención debida por inacción o descuido o por acción incorrecta, inadecuada o insuficiente. Popularmente, se conoce también como imprudencia. También, es la desatención de las obligaciones o descuido en el cumplimiento de las reglas y normas, una directa voluntad de omitir o retardar la acción debida, se trata, más bien, de una situación de culposa inercia y falta de cuidado.

Todas estas definiciones se aplican a la actuación directa del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Y por supuesto, a la actuación de todo su gobierno y a los responsables de las funciones de gobernación, seguridad pública, defensa nacional y marina. El gobierno del estado y municipal, son corresponsables. Todos, absolutamente todos son responsables de los trágicos acontecimientos de la madrugada del 25 de octubre, en la ciudad de Acapulco.

Antes de continuar, mi más sentida solidaridad, respeto y pésame a los deudos que perdieron a sus seres queridos, con el arribo del Huracán OTIS, que impacto los municipios de Coyuca de Benítez, Benito Juárez, Atoyac de Álvarez, Xalpatláhuac, Tecpan de Galeana y destrozo al grado de casi desaparecer el bello puerto de Acapulco.

El letal ciclón, de categoría 5 con vientos de hasta 320 km/hora, hizo pedazos toda una ciudad.

No estamos hablando de sólo los 27 muertos que se han reportado oficialmente hasta este momento que escribo el presente artículo, que, por cierto, llama poderosamente la atención la magnitud de los destrozos materiales, con el bajo índice de mortandad. No seria extraño que una vez más, el actual gobierno federal, el del estado de Guerrero y el municipal de Acapulco, todos del partido MORENA, oculten información y manipulen la cifra de muertos, como lo hicieron con el COVID.

Estamos hablando de la destrucción de toda una ciudad, de un municipio como lo es Acapulco. Las imágenes que nos comparten los medios de comunicación y las redes sociales son casi las mismas que vemos en Israel o en Gaza. No hay mucha diferencia. Son zonas devastadas, destruidas unas por el hombre, otras por la naturaleza en complicidad con la notoria negligencia de funcionarios que van desde el presidente de México, hasta las burocracias estatales y municipales.  

Todos tienen nombres y apellidos, un común denominador, pertenecen todos al mismo partido político, a su movimiento de transformación, que más bien, es destrucción. Ahí están las imágenes, las evidencias. Ahora no se trata del desabasto de gasolina, del infame e inhumano desabasto de medicamentos, del nefasto e inmoral manejo de la pandemia, de la negligente actuación de las autoridades migratorias en ciudad Juárez.

Cómo colofón las penosas, lamentables, deshonestas y negligentes actuaciones de imágenes de militares, marinos y guardia nacional en permitir y auspiciar con su silencio y falta de actuación, los penosos y vergonzosos actos de rapiña, robo, saqueo de innumerables centros comerciales, tiendas de conveniencia, farmacias y pequeños comercios de todo tipo, donde ciudadanos en calidad de damnificados, injustificadamente realizan actos delictivos.

Queda plasmado y evidenciado una vez más, que la ley y el estado de derecho no importa ni interesa a AMLO, a su gobierno, a su movimiento de destrucción y mucho menos a su partido MORENA, donde la anarquía y el desorden institucional, es una política pública que aplican como forma y estilo de vida en todo México y en Acapulco ha quedado retratado fielmente, con la penosa tragedia de un hecho sobrenatural, que perfectamente pudo ser menor la tragedia, si el gobierno hubiera realizado su trabajo con funcionarios preparados y capacitados.

Estado Unidos advirtió 21 horas antes, sobre el potencial de “OTIS” para convertirse en huracán categoría 5. El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, alertó que la entonces tormenta tropical, podría convertirse en huracán. Estas mismas autoridades pronosticaron que “OTIS” podría tocar tierra como huracán el martes 24 de octubre a las 2:48 de la madrugada.

Lo sabían las autoridades federales, estatales y municipales de Guerrero y les valió madre. Esto se llama negligencia criminal y se tiene que castigar.

 

¿No cree usted?

Dr. Carlos Dìaz Abrego