León-. El rostro de Ramón Sánchez Pimentel relata la edad de 77 años, y tras más de medio siglo de vida todavía su espalda era capaz de cargar hasta 45 kilos de cartón recorriendo las calles de León. Le acaban de obsequiar un triciclo que, aunque llega tarde, le cambiará la vida. Su espalda descansará un poco más.
Don Ramón circulaba orgulloso con un triciclo que le acababa de regalar el Ayuntamiento de León: “Ahora sí que la vida le empieza a sonreír a uno, y estoy apuntado desde hace más de un año aquí para los pepenadores y hasta ayer me llamaron que era acreedor a un triciclo”.
Y es que antes de la entrega él andaba en las calles recolectando basura, toda la que podía pero el esfuerzo de su encorvada espalda, dice recogía de todo: “cartón, lamina, fierro, viejo, lo que encontramos, dice un dicho muy vulgar, la basura de los ricos es la riqueza de los pobres, métase a la fraccionamiento de aquí en la Andrade, colonias donde tiran zapatos muy buenos y lo dejan de hasta de medio uso, ropa y todo”.
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Cada día recorre grandes distancias para poder mantenerse: “Doy una vuelta así grande, para estar operado de la cadera, porque traigo un fierro en la cadera, se me zafaron tres tornillos del tobillo derecho ¿Qué distancia calcula de aquí a la estación del tren en Las margaritas, póngale 8 de ida y 8 de venida”.
“¡Ah sí! Ya no voy a ir manqueando y cargando, nomás pienso acomodarlo para que no me quede tan alto porque con las fracturas que tengo, tengo miedo caerme”, dijo Don Ramón quien recoge cartón y plásticos para venderlo por kilo y ganar algunos pesos