León.- Jaime Calderón Calderón, arzobispo de León, se sumó al llamado de la Iglesia Católica de México, para que se dé una tregua definitiva entre los grupos delictivos en el estado de Guanajuato.
"Nosotros como iglesia, tenemos que apostarle siempre a la paz y los obispos lo hemos dicho siempre que es nuestra preocupación, ya hemos denunciado el crecimiento de las violencias desde 1960 porque no se ha afrontado adecuadamente y esto ha seguido creciendo de tal manera que nos sigue lastimando cada vez más a todos, les pedimos a todos (los grupos), sean católicos o no, que mientras no estén dañados de su conciencia, apelen al entendimiento de lo que es bueno y lo que es malo", dijo el Arzobispo.
Lo anterior lo comentó, ante el llamado de algunos sacerdotes en México, quienes pidieron una tregua durante la actual época decembrina, situación que no se ve reflejada en algunos estados, entre ellos Guanajuato, donde continúan los homicidios dolosos.
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A principios de diciembre, monseñor Francisco Javier Acero Pérez, Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis Primada de México, en el relanzamiento de la Escuela de Líderes Católicos de la Ciudad de México, pidió que no haya más muertos en el país, el cual está agobiado por la violencia en distintos estados.
La propuesta exigía que el pasado 12 de diciembre, en la celebración de la Virgen de Guadalupe, se diera una tregua de paz, situación que no se registró en ninguna de las entidades más conflictivas de México.
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"Como conferencia episcopal decidimos hacer este llamado y les pedimos que lo consideren, vivimos en un mundo confuso, donde parece que no hay una línea clara entre el bien y el mal, y tenemos que apelar a que lo malo es malo, y lo bueno es bueno, no puede estar sujeto a una ambición subjetiva de lo que es bueno para mí. El campo de la bondad se está restringiendo a unas personas", enfatizó.
Calderón Calderón lamentó que la ola de violencia no tenga freno, sin embargo, dijo que la iglesia continuará exigiendo la paz no sólo el 12 de diciembre de la Virgen de Guadalupe, el 25 de Navidad y en Año Nuevo, sino que pidió a los grupos delictivos que se retiren de dicha actividad de forma definitiva.
El arzobispo de León declaró que, en Guanajuato, los grupos delictivos están matando a sus hermanos católicos y se está denigrando a la población en general.
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Asimismo, dijo que la entidad se encuentra en una espiral de violencia y no se ha tocado fondo, por lo que convocó a la población a retirarse de los ambientes de violencia.
"La problemática es mala, porque no se trata de homicidios sino de fratricidios, se está matando a un hermano y se hace daño a una hermana, se hace daño a la humanidad y nos denigramos cada vez más, pedimos a estos grupos que tomen el camino del bien, no solamente en esta temporada, porque la espiral de violencia nunca termina, se percibe que nunca llegaremos al fondo. Si no nos detenemos nos estamos destruyendo y el mal y la cultura de la muerte nos sigue destruyendo", concluyó Calderón Calderón.
CM