León.- De acuerdo con datos históricos y antiguas fotografías, desde 1883, en que el Ing. Pedro Tejada León construyó el “Arco de la Paz” a base de madera, cartón y yeso, en lo que era en ese entonces la entrada principal a la Villa de León por la calle Real de Guanajuato (Hoy Francisco I. Madero), quienes entraban o salían de la ciudad en carretas o a caballo lo hacían por sus costados.
Cuando en 1896 se construyó el nuevo Arco de cantera, seguía siendo la entrada de la ciudad y ya se había construido la calzada, arbolada y con bancas, como una zona de paseo familiar.
Alguna vez se llegó a decir que por debajo del Arco pasaban carreteas, tranvía y jinetes, pero sobre esto no hay datos históricos para certificarlo.Ahora la duda surge de la esta página de Facebook que la usuaria María Enriquetapublicó:
Te podría interesar
Te podría interesar
Lo que sí existen son fotografías de la construcción de la calzada que daba un mejor aspecto a la entrada de la ciudad que fue denominada posteriormente como Calzada de los Héroes.
Fue en 1943 cuando se construyó la primera escultura del León, a base de mampostería, ladrillos, ladrillos, varilla, mezcla y modelado con cemento, por encargo del Don Francisco Lozornio Castillo, obra que corrió a cargo del albañil del Templo Expiatorio Daniel Herrera Jiménez.
El segundo y actual León se colocó el 16 de mayo de 1958, mide 3 metros de largo y lo construyó el escultor Humberto Peraza Ortega, a iniciativa y donación de 10 mil pesos del torero leonés Antonio Velázquez “Corazón de León”.
Frente al “Arco de la Paz” había paradero y circulación de tranvías, lo que en un principio generó la idea de que estos carruajes o tipo carreteras jalados por mulas y caballos, pasaban por debajo del arco, aunque esto es falso, pues ya estaba para ese entonces construida la calzada sólo para uso de peatones, protegida a sus costados por una barrera de árboles.
Las rutas de los tranvías cubrían principalmente en Barrio Arriba, y los barrios de Santiago, Coecillo, San Juan de Dios y San Migue.
Fotos como las de Juan Manuel Escalante y Fernando Cardiel, compartidas en redes sociales, dan fe de lo que fue desde un inicio este simbólico lugar de la ciudad, donde se muestra que el Arco nunca fue construido para que por debajo pasaran vehículos.
La calzada también sufriría con el tiempo modificaciones, desde al Malecón del Río hasta la calle Madero, ya que primero había una desviación hacia la izquierda hacia la calle Hernández Álvarez, después se hizo una vuelta en “U” metros antes de dicha desviación que daba hacia la Calzada Tepeyac, incluso hubo una fuente en los años 70’s a lo pies del Arco. Posteriormente se cerraría esta vuelta y con el nominado “Puente del Amor” se daría el paso hacia la Prolongación Calzada.