Guanajuato.- La presidenta Claudia Sheinbaum presentó desde Palacio Nacional el Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, una estrategia integral muy similar al que implementó en Guanajuato y Sinaloa al comienzo de su administración.
El programa llega en un momento crítico para Michoacán, Tres días después del asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, y enmedio de una disputa entre grupos criminales. Según Sheinbaum, el plan “parte de una convicción profunda de que la seguridad no se impone con guerras, sino con justicia y respeto a la vida”.
Un modelo que replica al de Guanajuato y Sinaloa
El Plan Michoacán toma como base el esquema de seguridad que la mandataria implementó en Guanajuato y Sinaloa desde hace poco más de un año, cuando comenzó su administración, y ambas entidades encabezaban la lista con el mayor índice de homicidios a nivel nacional.
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En primera instancia, el plan comenzará a ejecutarse con fomentar la creación de empleos, la construcción de escuelas, centros culturales y espacios deportivos para que, afirmó, los jóvenes se alejen de los grupos delictivos
Pero el modelo también consistirá en fortalecer la presencia de fuerzas armadas federales en la entidad.
Guardia Nacional y nueva Fiscalía especializada
El segundo componente del plan contempla el fortalecimiento de la Guardia Nacional y la creación de una Fiscalía de Inteligencia e Investigación para delitos de alto impacto, que trabajará coordinadamente con las fiscalías municipales.
También se instalarán mesas de seguridad regulares, y un sistema de alerta temprana para alcaldes, que funcionará como un “botón de pánico” ante amenazas o agresiones.
Una entidad con retos distintos
Pero la aplicación del Plan Michoacán enfrentará obstáculos muy diferentes, pues en comparación con Guanajuato, Michoacán tiene más del doble de municipios (113) y al menos ocho grupos criminales activos, entre los que destaca el Cártel Jalisco Nueva Generación, con enfrentamientos, extorsiones y cobro de derecho de piso.
Casos como el atentado contra la presidenta municipal de Cuitzeo y el más reciente asesinato del alcalde de Uruapan, reflejan la vulnerabilidad en la que se encuentra la población.
Con el Plan Michoacán por la Paz y la Justicia, Sheinbaum apuesta por controlar la ola de violencia que azota al Estado, considerado por mucho tiempo uno de los más riesgosos del país.
FN