León.- A pesar de las lluvias registradas este año, las dos presas de Ibarrilla permanecen prácticamente secas. Además, se han identificado indicios de extracción de piedra, arena y lama, lo que podría estar detrás de la situación.
Vecinos de la zona reportan pozos abiertos, sedimentos removidos, árboles talados y huellas de maquinaria pesada sobre el lecho fangoso, así como tolvas y trascabos. Además de la presencia de coladores metálicos de gran tamaño y montículos de piedra clasificados por tamaño, lo que apunta a que el agua ha sido extraída en ambas presas, sobre las cuales se desconoce que existan permisos vigentes.
La zona forma parte del Corredor Biológico Ibarrilla, incluido en un estudio del Instituto Municipal de Planeación (IMPLAN) de León, donde se advierte que este tipo de prácticas pone en riesgo el equilibrio ecológico.
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De acuerdo con la Ley de Aguas Nacionales, la extracción de materiales en cauces y cuerpos de agua requiere una concesión de la CONAGUA y una manifestación de Impacto Ambiental (MIA) aprobada por la SEMARNAT.
Organizaciones ambientalistas y vecinos destacan que, aunque no son presas grandes del municipio, Ibarrilla tiene un importante potencial ecológico y ecoturístico, por lo que hicieron un llamado a autoridades para rescatar estos cuerpos de agua.
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FN