Villagrán.- Escuchó una explosión y luego todo retumbó en el exterior, y su interior también. Así fue la explosión de un polvorín en Villagrán descrita por un lugareño. El sonido lo alertó y cuándo vio lo que era sacó su celular y captó lo que estaba viendo. Una enorme columna de humo se levantaba por varios metros. Debajo de ella había gente muerta.
Unas pocas palabras y una imagen grabada con un celular sencillo fueron suficientes para que este habitante de las comunidades de Guanajuato narrara la crónica de una explosión que dejó cinco personas sin vida.
“Unas fuertes explosiones, retumbó todo. Es por la carretera Villagrán”, dijo jadeante mientras grababa lo que tenía enfrente.
Otros habitantes describieron la misma sensación. Como una onda expansiva, la vibración intensa hizo temblar no solo el suelo y los pies de los lugareños, sino hasta fincas. Vidrios rotos en el sueño quedaron como la evidencia de la intensidad de esta explosión.
¿Cohetes o balazos? Nadie sabía solo sabían que las detonaciones les habían causado temor y alerta.
La información corrió en redes sociales y los medios la comunicaron. Fue un polvorín donde se elaboraban piezas de pirotecnia la que explotó la mañana de ayer en el municipio de Villagrán.
La “fábrica” de fuegos artificiales se encontraba en la comunidad de Suchitán, al norponiente de la cabecera municipal de Villagrán, y contigua al canal de Coria.
El saldo fue de cinco personas muertas, entre ellos había dos niños, uno de cinco y otra de tres años de edad. Los demás eran adultos de más de 30 años. Todos eran habitantes de Suchitán.
Los vecinos no tardaron en llegar a la escena. Todos ya sabían quiénes eran las víctimas, en la pequeña comunidad todos se conocían.
En el lugar, elementos del Ejército resguardaron la zona mientras paramédicos de Protección Civil se reunían con los familiares de las víctimas para darles la noticia fatal.
PR