León.- Karen Yépez Ortiz, hermana del “Marro”, Juan Antonio Yépez Ortiz, fundador del Cártel de Santa Rosa de Lima, es señalada como quien dio la orden de asesinar a la familia de un excomandante de la policía en Tarimoro. Murieron el “Comandante Rojas”, así como su hermano, su cuñada, su padre y una sobrina de siete meses.
De acuerdo con investigaciones de la Fiscalía de Guanajuato, la presunta autoría intelectual de Karen salió a relucir tras la captura de José “el Tiburón”, señalado como jefe de sicarios del cártel.
El asesinato de la familia ocurrió el pasado 22 de noviembre en la colonia San Isidro. Alrededor de las 7 de la mañana estaba el excomandante Rojas con los demás integrantes de su familia cuando llegó un grupo armado que entró por sorpresa y de manera violenta a la casa en la calle San Gabriel.
Te podría interesar
Ahí asesinaron a todos los presentes, incluyendo a una bebé de siete meses, sin ningún miramiento.
Aunque Rojas ya estaba separado de la Policía Municipal de Tarimoro, administraba una empresa de seguridad privada.
Desde agosto de 2020, cuando “el Marro” fue capturado por fuerzas estatales de Guanajuato, su hermana Karen Yépez ha participado en decisiones cupulares de la organización criminal, de acuerdo con publicaciones del portal Infobae.
Así, aunque José Antonio Yépez está en prisión, el cártel que fundó no ha dejado de perpetrar crímenes atroces, en los que destacan los asesinatos múltiples.
El sicario conocido como “el Tiburón” tiene en su haber más de 30 homicidios y secuestros cometidos entre 2017 y 2022, además de haber participado en el multihomicidio de Tarimoro.
En su declaración ministerial, el sicario habría señalado que el ataque a la familia del excomandante de Tarimoro habría sido por encargo de Karen Yépez Ortiz.
Policías en el blanco
Durante el pasado mes de octubre, la policía municipal de Tarimoro ha sido objetivo de ataques armados, en su personal y en sus instalaciones.
El 6 de octubre dos policías fueron acribillados a bordo de la patrulla en la que cubrían la vigilancia de la zona centro. Uno de ellos, Ricardo, de 47 años, murió al instante; Daniel, de 22 años, murió horas después en el hospital.
A principios de noviembre hubo un ataque directo contra la comandancia, en el cual otro agente preventivo fue alcanzado por disparos y resultó herido.
Después fue el asesinato de la familia de Rojas, excomandante de la corporación.
CV